Rusia utilizó por primera vez en la guerra un misil balístico intercontinental RS-26 Rubezh contra la ciudad ucraniana de Dnipró, marcando un punto de inflexión en el conflicto bélico.

El misil fue lanzado desde la región de Astraján, en el sur de Rusia, impactando infraestructuras críticas de Dnipró. Según la Fuerza Aérea ucraniana, el ataque incluyó:

– Un misil balístico intercontinental RS-26 Rubezh
– Misiles de crucero Kh-101
– Misil aerobalístico Kinzhal

El presidente ucraniano Volodímir Zelenski denunció que Rusia está utilizando Ucrania como “campo de pruebas” para su armamento.

El Kremlin aseguró que mantiene una “postura responsable” para evitar un conflicto nuclear, mientras que países como EE.UU., España, Italia y Grecia cerraron sus embajadas en Kiev ante el riesgo de un ataque masivo.

Las defensas ucranianas lograron derribar seis de los siete misiles Kh-101, pero no pudieron interceptar el misil balístico intercontinental ni el Kinzhal.

Según fuentes militares, el misil RS-26 Rubezh no había sido utilizado previamente en combate, lo que aumenta la significancia estratégica del ataque.

Con información de efe