El expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, podría enfrentar una posible acusación por encubrir supuestos pagos a una estrella porno durante su campaña presidencial de 2016. Los expertos legales señalan que cualquier juicio estaría a más de un año de distancia, lo que podría coincidir con los últimos meses de la campaña presidencial de 2024, en la cual Trump busca regresar a la Casa Blanca.

El fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, ha presentado pruebas ante un gran jurado de Nueva York sobre un pago de US$130.000 a la actriz porno “Stormy” Daniels, en los últimos días de la campaña presidencial de 2016 a cambio de su silencio sobre una supuesta aventura. Trump ha negado la relación y su abogado ha acusado a Daniels, cuyo nombre real es Stephanie Clifford, de extorsión.

De ser acusado, Trump sería el primer expresidente estadounidense en enfrentar un proceso penal. A pesar de esto, las encuestas lo muestran por delante de otros posibles rivales por la nominación republicana para la presidencia de 2024, incluido el gobernador de Florida, Ron DeSantis, de quien se espera ampliamente que presente una candidatura a la Casa Blanca.

El caso penal promedio en Nueva York tarda más de un año en pasar de la acusación al juicio, y el caso de Trump está lejos de ser típico. Esto plantea la posibilidad de que Trump tenga que ser juzgado en medio de la campaña presidencial de 2024, o incluso después del día de las elecciones, aunque llevar a un presidente electo o presidente a juicio por cargos estatales entraría en aguas legales inexploradas. De ser elegido, no tendría el poder de indultarse a sí mismo de cargos estatales.

El caso de Nueva York es uno de los varios centrados en Trump, incluida una investigación sobre la interferencia electoral en el estado de Georgia y un par de investigaciones federales sobre su papel en el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021 por parte de sus partidarios y sobre su retención de documentos clasificados después de abandonar la Casa Blanca.