Un video grabado en Sudán, en el que un soldado muestra documentos colombianos hallados en una zona de conflicto, reveló la participación de exmilitares colombianos en la guerra civil de este país africano. Entre los objetos encontrados figuran una cédula de ciudadanía y un pasaporte colombiano, lo que confirmó la llegada de mercenarios procedentes de Colombia al territorio sudanés.

Según una investigación de La Silla Vacía, al menos 300 exmilitares colombianos han sido contratados como mercenarios para apoyar a las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR), un grupo armado involucrado en el conflicto interno de Sudán desde abril de 2023. De estos, 40 se encuentran en Sudán en condiciones que algunos describen como engaño o incluso secuestro.

El conflicto en Sudán inició con un golpe de Estado liderado por las FAR, tras romper su alianza con el gobierno militar. Desde entonces, la guerra ha dejado más de 61.000 muertos, millones de desplazados y una crisis humanitaria agravada por el bloqueo de ayuda alimentaria en regiones como Darfur, donde operan los colombianos.

Reclutamiento y traslado: una operación transnacional

Los militares retirados fueron contratados bajo la promesa de realizar trabajos de seguridad en infraestructura petrolera en Emiratos Árabes Unidos. Sin embargo, al llegar a su destino inicial, muchos descubrieron que serían enviados a Sudán para integrarse como combatientes en el grupo golpista FAR.

La operación incluye empresas como International Services Agency A4SI, dirigida por un exoficial colombiano, y Global Security Services Group, una compañía de seguridad privada en Emiratos Árabes Unidos. Según testimonios, los reclutados firmaron contratos sin recibir copias de los mismos, lo que dificultó conocer los términos reales del acuerdo.

El traslado comenzó en Emiratos Árabes y continuó hacia Bengasi, Libia, donde los exmilitares fueron llevados a campamentos antes de cruzar el desierto hacia Sudán. Durante el trayecto, algunos colombianos sufrieron emboscadas y enfrentamientos, dejando muertos y heridos. Entre ellos se encuentra Christian Lombana Moncayo, identificado por documentos hallados por las milicias aliadas al gobierno sudanés.

Víctimas del conflicto

En octubre de 2023, un ataque en Darfur dejó al menos tres exmilitares colombianos muertos y cinco heridos. Uno de los fallecidos, el cabo retirado Diego Edison Hernández, fue identificado por su familia, quienes confirmaron su muerte tras un bombardeo.

La situación para muchos de estos exmilitares es compleja, pues afirman haber sido engañados y ahora temen por sus vidas. Algunos están atrapados en Sudán y otros en Libia, esperando regresar a Colombia sin éxito. Según sus testimonios, las condiciones de seguridad y la posibilidad de represalias dificultan cualquier intento de retorno.

Hasta ahora, la Cancillería colombiana no ha emitido una respuesta clara sobre la presencia de colombianos en Sudán o el proceso de repatriación de los fallecidos. Por otro lado, el conflicto en Sudán también ha evidenciado la participación de Emiratos Árabes Unidos, acusado de violar un embargo internacional de armas al apoyar a las FAR.

El caso de los exmilitares colombianos en Sudán pone de manifiesto el alcance de redes de mercenarios que operan a nivel global y la vulnerabilidad de quienes, motivados por ofertas económicas, terminan involucrados en conflictos ajenos. Mientras tanto, las familias de los afectados en Colombia esperan respuestas y acciones que permitan esclarecer esta compleja situación.

بس انا داير اعرف !"
الجوازات كلها مرتزقة من كولومبيا!!
السؤال دويلة الامارات دي دايرة شنو من السودان لدرجة تجند مرتزقة من امريكا اللاتينية !!
يا اخوانا يا ايها الشعب السودانى اقسم بالله المؤامرة كبيرة وكبيرة خالص ،،
وشكرانيين ،،#الدعم_السريع_منظمة_ارهابية… pic.twitter.com/9Aj1m4lTaG

— YASIN AHMED (@yasin123ah) November 21, 2024