Netanyahu rechaza alto el fuego en Gaza y Líbano durante su discurso en la ONU
Por: Ronny Orejarena
27 septiembre, 2024
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó este viernes ante la Asamblea General de la ONU que no aceptará un alto el fuego en ninguno de los frentes de conflicto en los que está involucrado Israel, ni en Gaza ni en Líbano. En un discurso marcado por un tono desafiante, Netanyahu defendió la postura de su gobierno y aprovechó la ocasión para tender la mano a Arabia Saudí, proponiendo un eventual acuerdo de paz y reconocimiento mutuo.
Netanyahu comenzó su intervención explicando que inicialmente no tenía intención de participar en la semana de Alto Nivel de la ONU, pero decidió asistir “tras escuchar todas las mentiras y calumnias dirigidas contra mi país desde este mismo podio”. Con estas palabras, se refirió a los llamados de numerosos países que instaron a Israel a declarar un alto el fuego en los últimos días.
Durante su discurso, que se extendió por 35 minutos, Netanyahu no mencionó explícitamente términos como “tregua” o “alto el fuego”. Sin embargo, dejó claro que, en relación con Gaza, su gobierno no descansará “hasta traer a los rehenes restantes a casa”, en referencia a las personas que permanecen en manos de Hamás desde el 7 de octubre. En el recinto, familiares de los rehenes presentes en Nueva York aplaudieron en diversas ocasiones sus declaraciones.
Gran parte del discurso de Netanyahu estuvo dedicado a advertir sobre la amenaza que, según él, representa Irán para Israel y para el mundo. El primer ministro mostró un mapa similar al que utilizó en su discurso del año pasado, en el que señaló a Irán y a sus aliados –Siria, Yemen y Líbano– como promotores de la guerra en la región. Al mismo tiempo, presentó una visión de un “mapa bendito”, donde un mundo árabe en paz con Israel podría ser un puente entre Europa y Asia.
En este contexto, Netanyahu lanzó un mensaje directo al gobierno iraní: “Si nos atacan, les atacaremos. No hay lugar en Irán que el largo brazo de Israel no pueda alcanzar, y eso vale para todo Oriente Medio”. Añadió que Israel no se conformará con ser “el carnero que va al sacrificio” y destacó el “increíble valor y sacrificio heroico” de sus soldados en el campo de batalla.
El primer ministro israelí también se dirigió a la comunidad internacional con un mensaje enfático: “Estamos ganando”. A lo largo de su discurso, Netanyahu evitó referirse directamente a la Autoridad Palestina o a los palestinos como un pueblo, y en su lugar, se enfocó en enviar un mensaje conciliador a Arabia Saudí, a la que invitó a considerar un acuerdo de paz mutuo. Según Netanyahu, este acuerdo traería prosperidad a la región en sectores como la economía, la seguridad, el turismo, la agricultura, el agua y la inteligencia artificial.
“Qué bendiciones podría traer la paz con Arabia Saudí”, afirmó, detallando los posibles beneficios de este acuerdo para la región y enfatizando que una alianza de este tipo sería un hito histórico que podría reconciliar a árabes e israelíes, al islam y al judaísmo, a La Meca y Jerusalén. Además, Netanyahu subrayó que los países que ya forman parte de los llamados “Acuerdos de Abraham” –Emiratos Árabes Unidos, Marruecos, Baréin, así como Egipto y Jordania, que previamente firmaron tratados de paz con Israel– comparten una visión similar.
El primer ministro señaló a Irán como el principal obstáculo para alcanzar esta paz, argumentando que Teherán, a través de sus aliados en Siria, Yemen y Líbano, se opone a cualquier tipo de reconciliación en la región.
Con información de bluradio y efe