En la primera audiencia pública celebrada este martes 30 de abril ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), el Gobierno de México acusó a Ecuador de “cruzar líneas que no se deben cruzar en el derecho internacional” por la violenta irrupción de la Policía ecuatoriana en la Embajada mexicana en Quito el pasado 5 de abril. El representante mexicano, Alejandro Celorio, no escatimó en críticas hacia las acciones de Quito para arrestar al exvicepresidente Jorge Glas, a quien México había concedido asilo político.

“Hay líneas en derecho internacional que no se deben cruzar. Lamentablemente, la República de Ecuador las ha cruzado. Las acciones de Ecuador no solo infringen los límites establecidos del derecho internacional, también crean un precedente desconcertante que reverbera en toda la comunidad internacional”, manifestó Celorio ante la CIJ con sede en La Haya.

El diplomático mexicano insistió en que Ecuador ha infringido “una de las piedras angulares que gobiernan las relaciones entre Estados” al irrumpir en la sede diplomática mexicana y agredir al personal consular. Asimismo, subrayó que en el núcleo del caso está “la certidumbre legal de cualquier otro Estado soberano, organización internacional o tribunal”.

Cita directa: “Hay líneas en derecho internacional que no se deben cruzar. Lamentablemente, la República de Ecuador las ha cruzado. Las acciones de Ecuador no solo infringen los límites establecidos del derecho internacional, también crean un precedente desconcertante que reverbera en toda la comunidad internacional”, explicó Alejandro Celorio.

Acusaciones de negligencia deliberada y falta de respeto

Durante su exposición, Celorio acusó a Ecuador de “negligencia deliberada” hacia las vidas de las personas que se encontraban en la Embajada durante el asalto. Además, señaló que esta incursión “muestra claramente la falta de respeto de Ecuador hacia las normas fundamentales, aceptadas universalmente y que existen desde hace tiempo”.

El representante mexicano también expresó su “duda preocupante” sobre las verdaderas intenciones de Quito en el asalto y lamentó que, incluso después del incidente, las declaraciones de los representantes ecuatorianos no han hecho más que aumentar su preocupación.

“No se nos han dado garantías creíbles para evitar nuevas infracciones ni Ecuador ha reconocido totalmente su obligación de no entrar en las premisas de México”, incidió Celorio.

Petición de medidas cautelares

Los argumentos mexicanos abren dos días de audiencias en la CIJ para escuchar los planteamientos sobre las medidas cautelares solicitadas por México contra Ecuador, a la espera del inicio del juicio y de la sentencia final del procedimiento que enfrenta a ambos países.

México ve necesario emitir medidas cautelares y solicita a la CIJ exigir a Quito “tomar medidas apropiadas e inmediatas para proporcionar plena protección y seguridad de las instalaciones diplomáticas, su propiedad y archivos, previniendo cualquier forma de intrusión contra ellas”.

Además, cree que la Corte debería instar al Gobierno ecuatoriano a permitir que México “despeje las instalaciones diplomáticas y la residencia privada de los agentes diplomáticos”, y que “no se tome ninguna acción que pueda perjudicar los derechos de México con respecto a cualquier decisión” que la CIJ pueda emitir sobre el fondo de la disputa.

“No se nos han dado garantías creíbles para evitar nuevas infracciones ni Ecuador ha reconocido totalmente su obligación de no entrar en las premisas de México”, incidió Alejandro Celorio, representante de México ante la CIJ.

Tras escuchar los argumentos de ambas partes, el tribunal se retirará a deliberar sobre la necesidad de esas medidas cautelares, que anunciará en cuestión de semanas, sin entrar aún en el contenido mismo del procedimiento, algo para lo que todavía no hay fecha de inicio.