Mercados globales se desploman ante firmeza de Trump en medidas arancelarias y temores de recesión

Por: Maria José Salcedo

7 abril, 2025

Mercados globales se desploman ante firmeza de Trump en medidas arancelarias y temores de recesión

Los mercados bursátiles globales sufrieron una fuerte caída este lunes, impulsados por la persistencia del presidente estadounidense, Donald Trump, en mantener sus planes arancelarios y el creciente temor de los inversores a una recesión económica. Las declaraciones del mandatario, en las que afirmó que los inversores “tendrán que tomar su medicina”, provocaron una jornada de pérdidas generalizadas en los principales índices y activos de refugio.

La reacción inmediata del mercado fue una revalorización en los futuros de tasas de interés, con operadores descontando hasta cinco recortes de un cuarto de punto en la tasa de referencia de la Reserva Federal (Fed) durante el 2025. Esta expectativa impulsó la caída de los rendimientos de los bonos del Tesoro y afectó negativamente al dólar frente a monedas consideradas refugio seguro, como el yen japonés y el franco suizo.

Los futuros del S&P 500 cayeron un 2,2%, mientras que los del Nasdaq descendieron un 2,4%. Ambos índices se suman a las pérdidas acumuladas de casi 6 billones de dólares registrados en la semana anterior. El temor de una desaceleración se extendió a Europa y Asia, reflejando un impacto global de la incertidumbre en torno a las políticas comerciales de Estados Unidos.

Caídas en los mercados europeos y asiáticos

En Europa, el índice Stoxx 600 registró una caída del 4%, con sectores como el bancario y el de defensa entre los más afectados. Las acciones de bancos cayeron un 5%, acumulando una pérdida superior al 20% desde su último máximo de cierre, lo que técnicamente los sitúa en un mercado bajista.

En Asia, el índice Hang Seng de Hong Kong cayó un 13% en una sola jornada, la mayor baja desde 1997. En la China continental, el índice CSI 300 perdió un 7%, frenando su descenso solo después de que medios estatales informaran que el fondo soberano Central Huijin intervino como comprador.

Impacto en el dólar, bonos y materias primas

La incertidumbre económica también afectó al mercado de bonos. El rendimiento del bono del Tesoro estadounidense a 10 años se mantuvo estable en 3,992%, tras acercarse al mínimo de seis meses. El dólar perdió un 0,4% frente al yen japonés (146,2) y un 0,8% frente al franco suizo (0,8533), mientras que el euro se mantuvo estable en 1,1005 dólares.

Por su parte, el petróleo también registró fuertes caídas. El crudo Brent bajó 2,3 dólares hasta los 63,30 dólares por barril, mientras que el WTI estadounidense cayó 2,20 dólares, alcanzando los 59,81 dólares por barril.

Incluso el oro, tradicional activo de refugio, retrocedió un 0,3%, situándose en 3.026 dólares por onza, lo que podría reflejar ventas para cubrir pérdidas en otros activos, en lo que algunos analistas consideran una venta de liquidación autoalimentada.

El mercado también se mantiene atento a los próximos datos de inflación en EE. UU., que se publicarán esta semana. Se espera un aumento del 0,3% en los precios al consumidor para marzo, aunque analistas advierten que los efectos de los aranceles podrían generar una presión inflacionaria más fuerte en los próximos meses, impactando sectores como alimentos y automóviles.

Además, se inicia la temporada de resultados trimestrales, con la presentación de balances de los grandes bancos a partir del viernes. Se estima que el 87% de las empresas estadounidenses cotizadas reportarán resultados entre el 11 de abril y el 9 de mayo. Según Goldman Sachs, muchas empresas podrían abstenerse de ofrecer previsiones para el segundo trimestre o el año completo, dada la volatilidad actual.

La persistencia del gobierno estadounidense en su estrategia comercial ha llevado a economistas a elevar el riesgo de una recesión. Bruce Kasman, director de economía de JPMorgan, estimó en un 60% la probabilidad de una recesión si las actuales políticas comerciales se mantienen.

Las tensiones con China y otros socios comerciales han aumentado la percepción de riesgo sistémico, lo que ha llevado a los inversores a ajustar sus carteras y buscar activos defensivos, generando una volatilidad que afecta tanto a los mercados emergentes como a los desarrollados.