El estrés se ha convertido en un problema creciente en todo el mundo y América Latina no es la excepción. De acuerdo con un estudio de la firma encuestadora Gallup, realizado entre 2009 y 2023, los síntomas relacionados con la ansiedad pasaron de afectar al 31% de la población global al 41%, un incremento de 10 puntos porcentuales en poco más de una década.

En la región, Bolivia encabeza la lista de países con mayores niveles de estrés: el 55% de su población afirma experimentar esta condición de manera regular. Este resultado la ubica como la nación más afectada de Latinoamérica en términos de bienestar emocional.

Después de Bolivia, República Dominicana y Costa Rica aparecen en el segundo puesto, ambas con un 51% de su población declarando altos niveles de estrés. El informe también reveló que Ecuador y El Salvador se posicionan en el cuarto y quinto lugar con un 50% cada uno, lo que significa que al menos la mitad de los habitantes en cinco países de la región reportan sentirse estresados con frecuencia.

En la sexta posición figura Perú, donde el 48% de las personas encuestadas manifestó estar bajo presión constante. Más abajo, Brasil y Uruguay comparten el séptimo puesto con un 46%, mientras que Argentina y Venezuela cierran el top 10 con un 45% cada uno.

Colombia, por su parte, no aparece dentro de los países más estresados de América Latina según este ranking, lo que marca una diferencia frente a sus vecinos en la región.

Los resultados del sondeo evidencian un desafío para la salud pública, pues el estrés sostenido no solo afecta el bienestar psicológico, sino que también puede derivar en complicaciones físicas y en una disminución de la productividad. Gallup advierte que los altos niveles de ansiedad en la región están vinculados con factores como la inestabilidad económica, la inseguridad ciudadana y las exigencias del entorno laboral.

La encuesta plantea un panorama complejo para los gobiernos latinoamericanos, que deberán reforzar sus políticas de salud mental y diseñar estrategias de prevención frente a una condición que ya impacta a millones de ciudadanos y amenaza con seguir en aumento en los próximos años.