El Papa Francisco recibió este jueves en el Vaticano a las participantes en la Asamblea General de la Unión de Madres Superioras de Italia (USMI), donde destacó la generosidad y valentía de las mujeres. Durante el encuentro, el pontífice afirmó que “es propio de las mujeres ser generosas, así es. A veces hay alguna neurótica pero esto pasa un poco en todas partes ¿no?”.

El líder de la Iglesia Católica describió su visión de las mujeres como personas “buenas, que saben crear nuevos caminos, saben dar” y también son “valientes”. Además, recordó que las mujeres, según el evangelio, fueron las primeras “testigos de la resurrección del Señor”, quienes además anunciaron la noticia al resto de los discípulos.

Francisco también hizo un llamado a estar pendientes de las “enfermedades” asociadas a la vida consagrada, especialmente la amargura. “Por favor, cuando vean eso en una comunidad o algunas monjas, ayúdenles a salir de esta situación; de las personas melancólicas que siempre piensan: ‘¡Ah, los viejos tiempos eran mejores! Las cosas no van, y aquí y allá…’. Ese es el elixir del diablo, el licor de la amargura”, advirtió.

Finalmente, el Papa pidió a las religiosas presentes en el encuentro que sean “sembradoras de esperanza”, porque “ser mujer es dar vida, abrir caminos, llamar a otros”. El discurso completo del pontífice fue difundido por la Santa Sede.