A poco más de un año sin información del exministro de Petróleo, Tareck El Aissami, y del exministro de Economía y Finanzas, Simón Alejandro Zerpa, por su presunta participación en una trama de corrupción en el sector petrolero, este martes, el fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, anunció en una conferencia de prensa su detención como una “segunda fase” de la investigación sobre las irregularidades en la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA)
Según el fiscal, se logró “develar la participación directa” de El Aissami y Zerpa, además de Samark López, en la trama de corrupción conocida como el caso “PDVSA-Cripto”. Los tres serán imputados en las próximas horas por los delitos de traición a la patria, apropiación indebida de bienes públicos, legitimación de capitales y asociación ilícita, entre otros. quienes serán presentados e imputados por el Ministerio Público en las próximas horas.
Saab explicó que las detenciones de estos tres exfuncionarios se lograron gracias a las declaraciones recientes de cinco testigos entrevistados por el Ministerio Público. “Hemos logrado que se develara la participación directa” de los implicados, señaló.
Según el fiscal, esta estructura criminal utilizaba una red de empresas fachada y criptomonedas para legitimar las ganancias obtenidas mediante la venta ilegal de crudo venezolano a precios muy por debajo del mercado. El dinero era posteriormente utilizado para la adquisición de bienes, inversiones inmobiliarias y otras actividades ilícitas.
“Hemos logrado desmembrar una red de funcionarios que usaban sus cargos para realizar operaciones petroleras ilegales, mediante la asignación de cargas de crudo a la Superintendencia Nacional de Criptoactivos y a particulares, sin ningún tipo de control administrativo ni garantías, incumpliendo con las normativas de contratación de PDVSA”, explicó Saab.
El fiscal general detalló que, una vez comercializado el crudo asignado ilegalmente, los implicados incumplieron con los pagos correspondientes a la empresa estatal. “Esta red utilizó un conglomerado de sociedades mercantiles para legitimar el dinero obtenido de dichas ventas, por medio de la adquisición de criptoactivos, bienes, muebles e inmuebles, e inversiones en el sector de la construcción e inmobiliario”, agregó.
Saab enfatizó que la investigación continúa abierta y no se descartan nuevas detenciones. Además, pidió un “castigo implacable” para estos exfuncionarios, cuyos planes, aseguró, tenían como objetivo “acabar con la economía del país”.
“La manera en que estos sujetos se unieron para realizar esta actividad pudiera calificarla como una de las más graves conspiraciones económicas para implosionar casi que totalmente el dólar paralelo”, enfatizó Saab.
El caso PDVSA-Cripto es la segunda fase de una investigación más amplia sobre una red de funcionarios que realizaban estas operaciones petroleras ilegales en la estatal PDVSA. En la primera etapa fueron procesadas 54 personas, cinco de las cuales se acogieron a la delación y aportaron pruebas clave.
Además, Saab vinculó estos hechos con una presunta red de trata de personas con fines de explotación sexual, siguiendo el modelo del también exfuncionario prófugo Rafael Ramírez.