El tortuoso proceso para obtener la visa estadounidense podría simplificarse a partir de 2025, cuando el Gobierno de ese país prevé implementar el concepto de “visa sin papel” en todos los países a los que exige dicho documento.

Así lo confirmó Julie Stufft, subsecretaria adjunta de Estado para Servicios de Visas, luego de que se realizara con éxito una prueba piloto únicamente con funcionarios. La idea es reemplazar la tradicional visa pegada sobre el pasaporte por una versión totalmente digital.

Si bien no se trataría técnicamente de una “visa electrónica”, el procedimiento sería similar, ya que no habría necesidad de contar con el documento físico una vez aprobado el trámite. “Acabamos de probar esto por primera vez, así que no es algo que vaya a suceder el próximo año”, matizó Stufft.

La representante estadounidense estimó que la implementación total demoraría alrededor de 18 meses. Es decir, el cambio podría estar operativo globalmente a mediados de 2025, tanto para nuevas solicitudes como para renovaciones.

“No lo llamamos visa electrónica porque tenemos el mismo proceso de visa hasta el momento del documento. La ley aún requiere una entrevista. Si es la primera vez que solicita, el proceso es igual, con los mismos formularios”, explicó.

De concretarse, esta transición a la “visa sin papel” representará un avance significativo para agilizar y modernizar el engorroso sistema de visados hacia Estados Unidos. En la actualidad, los tiempos de espera tanto para la cita como para la entrega del documento físico suelen demorar meses.