En video: Nueva York se sobresalta con un inusual terremoto de 4.8 grados

Por: Elizabeth Montoya

5 abril, 2024

La ciudad de Nueva York vivió una mañana de sobresalto este viernes 5 de abril al ser sacudida por un fuerte temblor de magnitud 4.8, inusual en esa zona. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), el sismo tuvo su epicentro cerca de Lebanon, Nueva Jersey, a unos 75 km al oeste de la Gran Manzana.

El poderoso temblor, considerado el tercero más intenso en los últimos 50 años en el área metropolitana, se prolongó varios segundos y se sintió con fuerza desde Brooklyn hasta El Bronx y Manhattan. Testigos lo describieron como un “estruendo violento” similar a “estar en un círculo de tambores”.

Pánico y medidas inmediatas

Tras el sismo principal, se registró una réplica de magnitud 2.0 media hora después. Aunque no hubo daños graves ni víctimas, los aeropuertos de Newark y JFK paralizaron operaciones brevemente para revisar las pistas por precaución.

El alcalde Eric Adams reconoció que no hubo “impactos de gravedad”, pero se multiplicaron las llamadas a números de emergencia y de padres preocupados por sus hijos en las escuelas. Las autoridades recomendaron mantener la calma y seguir la rutina.

No obstante, el vicealcalde Fabien Levy lanzó consejos como tirarse al piso, cubrirse la cabeza y buscar refugio bajo muebles ante posibles réplicas.

Zona de baja sismicidad

La gobernadora Kathy Hochul admitió que el sismo pilló por sorpresa al ser uno de los más fuertes del siglo en una región no acostumbrada a terremotos. Descartó daños en infraestructuras críticas, pero advirtió que podrían producirse más réplicas.

Pese a su poca profundidad a solo 5 km bajo tierra, lo que intensificó las sacudidas, hasta el momento no se reportan “graves incidentes” según Bomberos. El presidente Biden ofreció asistencia federal a Nueva York y Nueva Jersey de ser necesario.

El inusual fenómeno generó alarma en una urbe que no sufría un sismo de esta magnitud desde 2011. La famosa cuenta de X del Empire State bromeó: “ESTOY BIEN”, reflejando el desconcierto generalizado.