Condena internacional al plan israelí para ocupar la Ciudad de Gaza

Por: Maria Jose Salcedo

9 agosto, 2025

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu. Foto: JIM WATSON/AFP via Getty Images / JIM WATSON

El plan aprobado por el gabinete de seguridad israelí para tomar el control de la Ciudad de Gaza ha desencadenado una ola de condenas internacionales, con países aliados de Israel expresando preocupaciones sobre las consecuencias humanitarias de la operación.

La decisión del gobierno de Benjamín Netanyahu busca desmantelar el control de Hamás en el territorio palestino, pero implicaría el desplazamiento forzoso de aproximadamente un millón de habitantes de Gaza.

Alemania suspende exportación de armas israelíes

El canciller alemán Friedrich Merz anunció que su gobierno suspenderá hasta nuevo aviso las exportaciones de armamento a Israel que pudiera emplearse en la Franja de Gaza. La medida representa una respuesta directa a la aprobación del plan militar para ocupar la ciudad de Gaza.

Desde Alemania, uno de los aliados más fieles de Israel, que suspenderá la exportación de armas a Israel que puedan usarse en la Franja de Gaza, hasta China, que denunció “acciones peligrosas”, el plan israelí ha provocado la condena internacional.

Merz afirmó que este plan no permite comprender cómo Israel pretende alcanzar los objetivos de desarmar a Hamás, lograr la liberación de los rehenes y emprender negociaciones para un alto el fuego.

Países Bajos revoca licencias de exportación militar

El gobierno neerlandés retiró tres licencias previamente concedidas para la exportación de piezas de barcos militares a Israel por el “riesgo de uso final no deseado” en los bombardeos israelíes en Gaza. El ministro de Exteriores, Caspar Veldkamp, calificó la medida de “única” debido al “empeoramiento de la situación en la Franja de Gaza”.

Reino Unido y aliados rechazan enérgicamente la decisión

El primer ministro británico Keir Starmer calificó como “errónea” la decisión israelí e instó al gobierno de Israel a que “reconsidere de inmediato” la medida. “Esta acción no contribuirá en nada a poner fin a este conflicto ni a garantizar la liberación de los rehenes. Solo provocará más derramamiento de sangre”, señaló desde Downing Street.

Los ministros de Exteriores del Reino Unido, Alemania, Australia, Italia y Nueva Zelanda rechazaron “enérgicamente” en un comunicado conjunto la decisión del Gabinete de Seguridad israelí. Los jefes diplomáticos consideran que la operación “agravará la catastrófica situación humanitaria, pondrá en peligro la vida de los rehenes y aumentará el riesgo de desplazamiento masivo de civiles”.

Los cinco países firmantes del comunicado conjunto advirtieron que los planes anunciados por el ejecutivo de Netanyahu podrían quebrantar el derecho internacional humanitario. “Cualquier intento de anexión o de ampliación de los asentamientos viola el derecho internacional”, declararon.

Los ministros urgieron a Israel a modificar su sistema de registro de organizaciones humanitarias internacionales para permitir la reanudación de labores de asistencia a la población civil necesitada en Gaza, donde “se está gestando el peor escenario posible de hambruna”.

Reacciones desde Medio Oriente y Asia

China expresó “serias preocupaciones” sobre el plan israelí, instando a “cesar de inmediato sus acciones peligrosas”. Un portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores chino declaró que “Gaza pertenece al pueblo palestino y es una parte inseparable del territorio palestino”.

El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, afirmó que el Ejército israelí debe retirarse de la Franja de Gaza y que la seguridad del enclave debe asumirla “el Estado de Palestina con el apoyo árabe e internacional”. En conversación telefónica con el rey Abdalá de Jordania, Abás advirtió sobre la gravedad de la decisión.

Qatar declaró que la decisión israelí de “ocupar completamente la Franja de Gaza” constituye una “peligrosa escalada que amenaza con exacerbar la actual crisis humanitaria en el territorio”.

El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, calificó la decisión como una “escalada peligrosa” que “corre el riesgo de profundizar las ya catastróficas consecuencias para millones de palestinos”.

La portavoz asociada de Guterres, Stephanie Tremblay, expresó que la operación “podría poner en peligro aún más vidas, incluyendo la de los rehenes”.

Las familias de los rehenes israelíes en Gaza denunciaron la “imprudencia” del gobierno de Netanyahu tras la aprobación del plan. El Foro de Familias de Rehenes y Desaparecidos declaró que “nuestro gobierno nos está llevando hacia una catástrofe colosal para los rehenes y para nuestros soldados”.

 

 

Con información de caracol radio, dw