El Vaticano inició este viernes 25 de abril la ceremonia de cierre del féretro con los restos del papa Francisco, un acto privado celebrado en la basílica de San Pedro tras concluir la capilla ardiente abierta al público.

La ceremonia comenzó a las 8:00 hora local, presidida por el cardenal camarlengo Kevin Joseph Farrell, como parte del protocolo previo al funeral que se celebrará mañana sábado 26 de abril en la Plaza de San Pedro.

Durante el solemne acto se procedió a la lectura del “rogito”, un documento oficial que resume la vida y obra del pontífice argentino. Este texto fue firmado por destacadas autoridades eclesiásticas presentes, entre ellos el cardenal Giovanni Battista Re, quien oficiará el funeral; Pietro Parolin, secretario de Estado; y Mauro Gambetti, arcipreste de la basílica.

El protocolo funerario, desarrollado en estricta privacidad, comenzó con un momento de oración en silencio, seguido por una plegaria adicional del celebrante. Posteriormente, el maestro de ceremonias Diego Ravelli cubrió el rostro del difunto papa con un velo de seda blanca, mientras el celebrante rociaba el cuerpo con agua bendita.

A continuación, se depositaron en el ataúd las monedas y medallas acuñadas durante el pontificado junto con el tubo que contiene el acta o “rogito”, previamente sellado con el emblema de la Oficina de las Celebraciones Litúrgicas.

El proceso continuó con la colocación de la tapa de zinc del féretro, que exhibe la cruz, el escudo papal y una placa con su nombre, fechas de nacimiento y muerte, así como la duración de su papado. Este ataúd fue sellado con los sellos oficiales del cardenal camarlengo, la Prefectura de la Casa Pontificia, la Oficina de las Celebraciones Litúrgicas Pontificias y el Capítulo Vaticano.

Como último paso, se cerró el féretro exterior de madera, también adornado con la cruz y el escudo del pontífice fallecido.

Con información de wradio y efe