En mayo de 2023, Brigitte García, con solo 26 años, se convirtió en la alcaldesa más joven de Ecuador al asumir el cargo en el cantón de San Vicente, en Manabí. Sin embargo, diez meses después, su prometedora carrera política se vio truncada de manera violenta cuando fue encontrada sin vida, junto a su jefe de comunicaciones, Jairo Loor, dentro de un vehículo, víctima de disparos.

García, enfermera de profesión, había sido elegida como alcaldesa bajo la bandera del Movimiento Revolución Ciudadana, liderado por el expresidente Rafael Correa. Durante su campaña, se comprometió a abordar las necesidades urgentes del cantón, especialmente la falta de agua potable.

San Vicente, una comunidad costera de aproximadamente 25.000 habitantes, depende principalmente de la pesca y el turismo, pero carece de servicios básicos como agua potable y alcantarillado. La joven alcaldesa tenía como uno de sus principales objetivos llevar el acueducto al municipio, una tarea que aún estaba en proceso.

El gobierno nacional ha condenado el asesinato de García y Loor, asegurando que están trabajando en colaboración con la policía y la fiscalía para llevar a cabo una investigación rápida. Además, se anunció un refuerzo en las políticas de seguridad para garantizar el orden y la paz en todo el país.

El expresidente Correa expresó su consternación por la muerte de García en sus redes sociales, describiéndola como una líder joven y prometedora. Sin embargo, este trágico suceso pone de manifiesto la creciente violencia en Ecuador, especialmente en regiones como Manabí, que ha sido afectada por el tráfico de drogas y el crimen organizado.

García, desde su adolescencia, había mostrado interés por la política y había participado en diversos proyectos en su región. A pesar de las críticas por su juventud e inexperiencia, se había dedicado a trabajar por el bienestar de su comunidad y había sido elegida democráticamente como alcaldesa.

Tristemente, su visión y proyectos quedaron truncados por este acto de violencia sin sentido. Las autoridades informaron que los disparos se produjeron dentro del vehículo, lo que sugiere que el atacante podría haber estado con ellos en ese momento, dejando muchas preguntas aún sin respuesta.

La región de Manabí ha sido testigo de un aumento preocupante en la violencia, con más de 124 asesinatos solo en 2024, según cifras policiales. La militarización de ciudades como Manta ha llevado a que las bandas criminales busquen nuevas áreas para continuar con sus actividades ilícitas, lo que ha generado un clima de inseguridad en comunidades como San Vicente.

A pesar de los esfuerzos del gobierno por controlar la violencia, crímenes como la extorsión y el secuestro continúan siendo una amenaza para la población, destacando la urgencia de abordar este problema de manera integral y efectiva.