Al menos 22 personas perdieron la vida y otras 42 resultaron heridas en tres presuntos ataques contra las oficinas de tres candidatos políticos en Pakistán. Estos ataques ocurrieron en dos de las provincias más conflictivas del país, apenas a un día de la celebración de las elecciones generales.

En el más reciente incidente, diez personas fallecieron y otras 12 resultaron heridas en una explosión en las oficinas del partido Jamiat Ulema-e-Islam (F) en la localidad de Qilla Saifullah. Según informó el oficial de policía regional Muahmmed Ramzan, el edificio de la sede del partido se incendió tras la explosión.

Además, otras cinco personas resultaron heridas en una tercera explosión contra un vehículo del partido opositor Pakistán Tehreek-e-Insaf (PTI) en el distrito tribal de Waziristán del Sur.

Estos ataques se suman a otro ocurrido más temprano en la misma provincia, donde un candidato independiente regional en la ciudad de Khanozai fue blanco de un ataque que dejó al menos 12 personas muertas y 25 heridas. Según fuentes oficiales, el candidato no se encontraba presente en su oficina en el momento de la detonación.

El tercer incidente tuvo lugar en el distrito tribal de Waziristán del Sur, cuando una explosión alcanzó el vehículo del parlamentario Naseerullah Wazir, del partido Pakistán Tehreek-e-Insaf, dejando al menos cinco personas heridas.

Hasta el momento, ningún grupo u organización insurgente ha reclamado la autoría de estos ataques. Sin embargo, se producen en un contexto de aumento de la violencia contra candidatos electorales y personal de la Comisión Electoral, especialmente en las provincias de Baluchistán y Khyber Pakhtunkhwa, donde hay una presencia significativa de movimientos armados insurgentes.

Este incidente se suma a otros episodios recientes de violencia en Pakistán, como el ataque insurgente del pasado 5 de febrero contra un centro de las fuerzas de seguridad en la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, que dejó al menos diez policías muertos y seis heridos.