Recaudo proyectado por los juegos en línea es “imposible de alcanzar” ¿Por qué?
Por: Maria José Salcedo
16 septiembre, 2024
Durante la pandemia, las apuestas en línea experimentaron un notable incremento en su popularidad, convirtiéndose en una de las actividades de entretenimiento más destacadas en el sector digital. Según datos recientes, este tipo de juego de suerte y azar, que forma parte del Producto Interno Bruto (PIB) bajo la categoría de actividades artísticas, de entretenimiento y recreación, ha mostrado un crecimiento acelerado entre 2021 y 2023, con una tasa promedio del 26,8%, mucho más alta que el 4,4% registrado entre 2006 y 2020.
Sin embargo, este notable crecimiento ha colocado a las apuestas en línea en el centro de un debate tributario. El Gobierno de Colombia, en su proyecto de ley de financiamiento, ha propuesto gravar estas plataformas con un Impuesto al Valor Agregado (IVA) del 19%, con la meta de recaudar $2,1 billones en 2025.
El Ministerio de Hacienda justifica esta medida señalando que los ingresos generados por las apuestas en línea pasaron de $16 billones en 2021 a $35,6 billones en 2023. Según el ministerio, gravar este sector no generaría un impacto inflacionario y contribuiría a una mayor equidad en el sistema tributario. Además, consideran que la actual exclusión del IVA en las apuestas digitales crea una distorsión en el mercado, ya que las plataformas físicas de juegos de azar sí están sujetas a este impuesto.
Desde el punto de vista del Gobierno, los juegos de azar, considerados bienes de lujo, pueden contribuir de manera más justa sin comprometer la viabilidad económica de las plataformas, dado que no son bienes esenciales como los alimentos o los medicamentos.
Reacciones de la industria del juego en línea
A pesar de los argumentos del Gobierno, los gremios y operadores de apuestas en línea en Colombia han expresado su desacuerdo con esta propuesta. Juan Carlos Restrepo, presidente de Asojuegos, asegura que el recaudo proyectado de $2,1 billones es “imposible” de alcanzar, argumentando que el cálculo del Gobierno no refleja la realidad del funcionamiento de estas plataformas.
Restrepo explicó que en las apuestas en línea, los usuarios suelen realizar depósitos en sus cuentas y pueden apostar varias veces con ese mismo monto. Según él, el Gobierno está gravando los créditos de participación en lugar de dinero real, lo que distorsiona la evaluación de los ingresos. Para 2023, los operadores, que trabajan bajo contratos con Coljuegos, reportaron ingresos reales de $2,1 billones, cifra muy inferior a los $35,6 billones estimados por el Ministerio de Hacienda.
Además, Restrepo advirtió que la implementación del IVA en las plataformas online podría reducir el retorno al jugador, que actualmente es del 93%, a un rango entre el 71% y el 75%. Este cambio incentivaría a los usuarios a migrar hacia plataformas ilegales o internacionales que no están sujetas a las mismas cargas tributarias, afectando negativamente la formalidad del sector y las transferencias que se destinan al sistema de salud.
El riesgo de afectar la formalidad del sector
Evert Montero Cárdenas, presidente de Fecoljuegos, también se pronunció sobre la propuesta del Gobierno, afirmando que el Estado no comprende cómo funciona el negocio de las apuestas en línea. Según Montero, los depósitos que los jugadores realizan en sus cuentas no constituyen ingresos para las plataformas, sino créditos que se utilizan para apostar, lo que no representa un incremento en el patrimonio de las casas de apuestas.
Montero sostuvo que los $2,1 billones que el Gobierno pretende recaudar “no existen”, y que la aplicación del IVA podría llevar a una disminución en la formalidad del sector, ya que muchos jugadores optarían por migrar a operadores no regulados.
Ante la preocupación de que la tributación afecte las transferencias al sistema de salud, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, aseguró que no habrá un impacto negativo. Sin embargo, los representantes del sector siguen manifestando su desacuerdo, destacando que cualquier reducción en la formalidad afectaría la capacidad de generar ingresos destinados a estos fines sociales prioritarios.
En resumen, mientras que el crecimiento de las apuestas en línea ha sido un impulso para el sector del entretenimiento, la propuesta del Gobierno de gravar esta actividad con un IVA del 19% ha generado un amplio debate entre los operadores y gremios. La viabilidad de esta medida y su impacto en la formalidad y en las transferencias a sectores clave como la salud siguen siendo temas de discusión cruciales para el futuro de esta industria en Colombia.