El dólar inició la semana con una tendencia a la baja, cotizándose en $4.394,33, tras la nominación de Scott Bessent como futuro secretario del Tesoro por parte de Donald Trump. La divisa se ubicó $24,25 por debajo de la Tasa Representativa del Mercado, con un máximo de $4.398 y un mínimo de $4.386, registrándose 10 transacciones por US$3.000 millones.

Según Bloomberg, el nombramiento de Bessent, reconocido administrador de fondos de cobertura, alivió las preocupaciones sobre la agenda inflacionaria del presidente entrante. Este movimiento ha generado expectativas de amplios recortes de impuestos y revisión de aranceles comerciales, lo que ha impactado positivamente las acciones y los bonos del Tesoro.

El mercado mantiene su atención en próximos eventos económicos clave. Esta semana serán fundamentales dos informes: el miércoles se publicará el índice de consumo personal, mientras que el viernes, coincidiendo con el Black Friday, se revelarán datos sobre la salud del consumidor estadounidense.

El contexto actual muestra que el dólar lleva ocho semanas consecutivas al alza, con indicadores técnicos en sobre compra. Mauricio Acevedo, estratega de Corficolombiana, destacó la volatilidad del mercado tras las elecciones presidenciales.

Paralelamente, los precios del petróleo mostraron un ligero retroceso, con el crudo Brent bajando a US$74,91 y el West Texas Intermediate a US$70,97, en un escenario marcado por tensiones geopolíticas entre potencias occidentales, Rusia e Irán.

Los mercados esperan señales adicionales sobre política monetaria de la Reserva Federal y desarrollos geopolíticos que puedan influir en la dinámica económica global.

Con información de la republica