El primer aniversario de la implementación del decreto 2598 del 23 de diciembre de 2022 en Colombia, que elevó los aranceles al 40% ad valorem para las importaciones de confecciones, ha dejado notables efectos en la industria textil del país. Las marcas internacionales enfrentan ajustes en sus estrategias comerciales, evidenciados por la disminución significativa de importaciones y cambios en el panorama económico.

Las cifras reveladas por Mall & Retail, una plataforma de asesoría en gestión y mercadeo, ofrecen una visión reveladora de la situación. En 2023, las importaciones totales colombianas alcanzaron los USD 62,796.6 millones, marcando una disminución del 18.9% en comparación con el 2022 (USD 77,413.4 millones) y del 19.2% respecto a 2019 (USD 52,702.6 millones).

El impacto directo se refleja en las operaciones de las empresas de moda, que en diciembre de 2023 adquirieron productos del exterior por un total de USD 59.7 millones, mostrando una reducción del 17.3% en comparación con el mismo mes de 2022 (USD 72.2 millones). A lo largo del año, las marcas del retail textil importaron USD 549.7 millones, un 26.3% menos que en 2022, donde se registraron USD 745.8 millones en importaciones.

Entre las marcas afectadas, se destacan Koaj, con una disminución del 60.6% al pasar de USD 50.4 millones en 2022 a USD 19.8 millones en 2023. Falabella ocupó el segundo lugar, registrando importaciones de USD 37.5 millones y una caída del 44.3% en comparación con 2022 (USD 67.4 millones). La multinacional alemana Adidas experimentó una reducción del 23.3%, pasando de importar USD 36.2 millones en 2022 a USD 27.6 millones en 2023.

Leopoldo Vargas Brand, director ejecutivo de Mall & Retail, sostiene que el aumento de aranceles no ha contribuido al crecimiento de la producción nacional. La industria textil colombiana sufrió una caída acumulada del 12.2% en 2023, acompañada de una pérdida de empleos del 5.2%.

Vargas Brand resalta: “La medida ha incrementado el costo final de la ropa para los colombianos, la disparada del contrabando y ha permitido subir los impuestos con lo cual el único beneficiado ha sido el Gobierno.” Además, señala que el recaudo de impuestos de aranceles en diciembre de 2023 aumentó un 38.9%, evidenciando una mayor carga fiscal para los consumidores.

El Comité de Asuntos Aduaneros, Arancelarios y de Comercio Exterior había destacado la necesidad de impulsar un equilibrio en el comercio internacional y generar mayor valor agregado. Al entrar en vigencia el decreto, el impuesto pasó del 15% después de los USD 10 a un 40% en todas las importaciones.

La Cámara Colombiana de la Confección agradece al presidente Gustavo Petro por “apostarle a la industria y el empleo nacional”. Camilo Rodríguez, presidente de la Cámara, asegura que el decreto permitirá generar más empleos en Colombia, reducir el déficit en la balanza comercial del sector y reactivar 37 subsectores dependientes de las confecciones.

A pesar de las afirmaciones de algunos gremios sobre un posible aumento del 40%, Rodríguez aclara: “No habrá tal incremento del 40%, que ha sido el argumento que han usado algunos gremios”. Reconoce que habrá un alza, aunque no de la magnitud previamente mencionada, sugiriendo un ajuste en los precios de la ropa y calzado importados.