Febrero es el mes tope para que comercios implementen la facturación electrónica, la cual contempla importantes cambios en el proceso que afectarán a comerciantes y empresas en todo el país. Estos cambios, establecidos en los plazos de implementación de la factura electrónica, buscan mejorar la transparencia y la eficiencia en el registro de transacciones comerciales.

Uno de los principales cambios que entrarán en vigencia a partir del 3 de febrero es la obligatoriedad de emitir las facturas electrónicas exclusivamente en pesos colombianos. Esto significa que ya no será posible emitir facturas en dólares, y todas las transacciones deberán ser registradas en la moneda nacional. Se permitirá la inclusión de valores en una segunda moneda en un suplemento del XML, brindando flexibilidad a los comerciantes que realicen transacciones internacionales.

Otro cambio importante es la ampliación del alcance de la factura electrónica en los puntos de venta (POS). A partir del 3 de febrero, todas las ventas realizadas en puntos de venta deberán generar factura electrónica o documento equivalente electrónico, independientemente del valor de la venta. Anteriormente, esta obligación solo aplicaba a las ventas superiores a 5 UVT (Unidad de Valor Tributario). Esta medida busca fortalecer el control y la trazabilidad de las transacciones comerciales, reduciendo la informalidad y la evasión fiscal.

Estos cambios representan un desafío significativo para los comerciantes, tanto en términos de adaptación tecnológica como de servicio al cliente. Para cumplir con los nuevos requisitos, se recomienda a los comerciantes trabajar en estrecha colaboración con sus proveedores tecnológicos y asegurarse de que sus sistemas estén actualizados y en pleno funcionamiento antes de la fecha límite.

Es importante destacar que el incumplimiento de estas regulaciones puede acarrear sanciones económicas severas. La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) ha anunciado que el incumplimiento puede resultar en sanciones equivalentes al 5% de los ingresos operacionales o incluso el cierre del establecimiento.

Para ayudar en la transición, la Dian ha llevado a cabo capacitaciones y programas de asistencia técnica para los comerciantes. Sin embargo, es fundamental que los comerciantes tomen las medidas necesarias para cumplir con los nuevos requisitos dentro del plazo establecido, a fin de evitar posibles consecuencias negativas para sus negocios.