La falta de educación financiera agrava los problemas de salud mental en Colombia

Por: Elizabeth Montoya

1 noviembre, 2023

La reciente encuesta del Ministerio de Salud encontró que el 66,3% de los colombianos padece problemas de salud mental, una cifra que podría estar relacionada con las fallas en educación financiera, según expertos.

Si bien no existen estudios definitivos al respecto en el país, evidencia internacional sugiere que la falta de conocimientos para gestionar las finanzas contribuye a mayores niveles de estrés y depresión, debido a la constante preocupación, por entorno económico incierto o los desafíos de cada uno en la gestión diaria de sus finanzas,.

“Observo cómo la salud financiera influye en todas las áreas de la vida. La falta de ella genera preocupación constante ante un entorno económico incierto”, afirma Juliana Gómez, docente de finanzas.

Según Gómez, se necesita una formación financiera de calidad, que vaya más allá de los números y enseñe a aplicar ese conocimiento en la vida real, tomando decisiones conscientes y equilibradas.

De acuerdo a la encuesta de inclusión financiera de 2022 en Colombia (Banca de las Oportunidades), la mayor parte del ahorro se destina a emergencias, sin planificación a largo plazo. Además, solo el 26,5% de los colombianos tiene un seguro voluntario y la mitad tiene bajo bienestar financiero.

Esto evidencia carencias en educación financiera pese a esfuerzos públicos y privados por cerrar las brechas, lo que se traduce en consecuencias para los bolsillos y bienestar mental de los ciudadanos.

Ante este contexto, expertos consideran fundamental integrar la formación financiera en la agenda de salud mental del nuevo Plan Nacional de Desarrollo, para beneficiar la prosperidad económica y bienestar de los colombianos.

 

Preocupación mundial

El impacto de las finanzas en la salud mental no es preocupación exclusiva de Colombia, de hecho, un reciente informe de la American Psychological Association (Asociación Americana de Psicología, APA), ‘Paying with our health’ (“Pagando con nuestra salud”),  destaca que el estrés crónico producido por los retos financieros afecta al 26% de los estadounidenses.

Millones de personas en Estados Unidos, especialmente familias con hijos, jóvenes y sectores de bajos ingresos, advierte un informe de la Asociación Americana de Psicología (APA) sufre problemas de salud mental debido a los gastos inesperados, la falta de ahorros para la jubilación y los tratamientos médicos costosos. La ansiedad constante puede derivar en conductas de alto riesgo, como abuso de sustancias, trastornos alimenticios o comportamientos sedentarios, alertan los expertos.

Una investigación de la Universidad Springer Link reveló que entre estudiantes británicos los problemas económicos incrementan el estrés, la depresión y el alcoholismo, obligando a muchos jóvenes a abandonar la educación superior.

Tomar acción

Pese a la grave crisis en materia de salud mental, especialmente en Latinoamérica, pocos sistemas sanitarios invierten en esta área y se estima que solo el 1,8% del gasto público en América Latina y el Caribe se destina a la salud mental.

Para mejorar la situación, organizaciones como Mental Health First Aid apuntan a soluciones individuales y buscar activamente una buena educación financiera como responsables de nuestra salud mental y la de nuestras familias, ayudando a prevenir y superar imprevistos.

En este sentido, Mental Health First Aid International brinda algunos consejos para retomar el control de la salud financiera y reducir el estrés asociado con los problemas monetarios, entre los cuales se encuentran:

1. Mentalizarse:

  • Reconocer que ignorar los problemas financieros no los hará desaparecer. Cuanto más tiempo se retrase la toma de medidas, más complicada será la solución. Un comienzo podría ser llevar un registro de los gastos y el estado de ánimo, a fin de identificar patrones y desencadenantes, permitiéndote evitar decisiones financieras impulsivas.  La ansiedad financiera puede desencadenar síntomas como insomnio, cefaleas, problemas digestivos, palpitaciones, alopecia nerviosa e irritabilidad.

2. Buscar un asesor financiero:

  • Solicitar la ayuda de un experto en finanzas para analizar nuestra situación monetaria y recibir orientación sobre cómo mejorarla. Existen asesores financieros en línea o buscar en el área de residencia. Este te ayudará a organizarte, crear un presupuesto realista, gestionar deudas y darte estrategias para adherirte a un presupuesto semanal como el uso de herramientas financieras que te permitan separar tus fondos en cuentas diferentes para evitar gastos no planificados.

3. Informarse:

  • Investigar posibles ayudas financieras disponibles a nivel local o estatal. Muchas veces, hay recursos y programas diseñados para apoyar a personas con dificultades económicas.

4. Encargarse de las facturas:

  • Si existen dificultades para cubrir los gastos básicos como gas, electricidad o agua, se puede contactar a las empresas proveedoras, ya que algunas cuentan con bonos sociales, reprogramación de pagos y otras ayudas destinadas a clientes con problemas financieros.

5. Retrasar gastos importantes:

  • Considerar posponer compras costosas hasta hablar con un asesor financiero, explorando posibles opciones de financiación y toma decisiones informadas sobre gastos importantes. Es importante recordar que nadie planea las crisis, pero estar preparado es esencial, por lo que además de crear un fondo de emergencia, puedes asegurarte en áreas clave como salud, automóvil y vivienda, recordando que la seguridad financiera reduce el estrés en momentos de necesidad.

Más allá de estas recomendaciones, lo importante es priorizar el bienestar físico y mental, asegurándose de dormir lo suficiente, considerando la terapia si es necesario y manteniendo un estilo de vida saludable -tanto en actividad física como en alimentación- y fomentar relaciones sociales positivas, para obtener un círculo virtuoso que impacte positivamente en nuestras finanzas.