Industria colombiana de café reporta un repunte en su producción en 2024
Por: Maria José Salcedo
12 noviembre, 2024
La producción de café en Colombia ha mostrado un crecimiento sostenido durante 2024, reflejándose en cifras positivas tanto en cosechas como en exportaciones. En la reciente 88ª Cumbre Cafetera, los líderes del sector destacaron las estrategias implementadas para aprovechar este buen momento y fortalecer la rentabilidad y productividad de los caficultores colombianos.
Según la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), entre enero y octubre de 2024, la producción de café en Colombia aumentó un 18% respecto al mismo período en 2023, alcanzando 10,4 millones de sacos de 60 kg. Las proyecciones para fin de año estiman una producción total de 12,5 millones de sacos, impulsando el posicionamiento del café colombiano en el mercado global.
El alza en la producción de café ha coincidido con precios favorables en el mercado, beneficiando a los productores y exportadores colombianos. Sin embargo, la sostenibilidad de estos precios y de los recursos generados es un tema de análisis para asegurar la rentabilidad del sector en caso de fluctuaciones del precio internacional.
Germán Bahamón, gerente de la FNC, advirtió que aunque los precios actuales representan una compensación tras la crisis de 2023, no puede considerarse una bonanza cafetera. Para hacer frente a posibles caídas de precios, se han implementado mecanismos como el Fondo de Estabilización de Precios del Café, el cual acumula recursos para mitigar el impacto de eventuales variaciones en el valor del grano.
Gustavo Gómez, director ejecutivo de Asoexport, subrayó las oportunidades para el café colombiano mientras países como Vietnam y Brasil, que producen el 56% del café mundial, enfrentan dificultades. Este contexto brinda a Colombia la posibilidad de consolidar su presencia en el mercado, resaltando la calidad del grano colombiano que es altamente valorada en mercados internacionales.
Además, Bahamón explicó que Colombia trabaja en mantener sus cultivos jóvenes y productivos mediante la renovación de cafetales y el uso de técnicas de fertilización con mejor densidad. Estas medidas buscan asegurar la productividad y rentabilidad del sector en el largo plazo, reforzando la capacidad de respuesta del país ante la alta demanda mundial.
Innovación y resiliencia frente al cambio climático
El cambio climático representa un desafío continuo para la caficultura colombiana. La FNC ha desarrollado investigaciones sobre variedades de café resilientes, capaces de resistir los efectos del clima y las principales plagas. Esta innovación permite que Colombia mantenga un flujo constante de producción de café arábica suave, caracterizado por su alta calidad y demandado en todo el mundo.
“El consumo global de café está muy cercano a la oferta, lo cual genera presiones en el precio. Los inventarios certificados están disminuyendo, tanto en los países de origen como en destino, lo que evidencia un creciente apetito por el café”, explicó Bahamón. Esto representa una ventaja para Colombia, que sigue destacándose como un país productor confiable en el entorno mundial.
Sostenibilidad y encadenamiento productivo
La visión del sector es fortalecer todos los eslabones de la cadena de valor del café, desde los pequeños productores hasta los exportadores. Para Bahamón, el reto está en consolidar el desarrollo de las cooperativas y asociaciones para garantizar el crecimiento del sector y su sostenibilidad económica en el tiempo.
Bahamón subrayó que el sector cafetero es clave para la reactivación económica de Colombia, al ser uno de los principales motores de desarrollo regional después del sector energético. “Nuestra prioridad es lograr que esta reactivación económica se mantenga y que el café siga siendo un pilar fundamental en las regiones y un constructor de tejido social”, afirmó.
Café colombiano: un referente mundial
Colombia se destaca por ser uno de los pocos países que produce café fresco durante todo el año. Esto otorga al sector una confiabilidad excepcional en el ámbito mundial, posicionando al café colombiano como uno de los mejores del mundo.
El gerente de la FNC concluyó destacando el papel de la institucionalidad cafetera en el desarrollo de este sector a lo largo de 97 años. “Trabajamos junto a todos los actores de la cadena y con organizaciones como Analdex y Asoexport para asegurar que los exportadores puedan ofrecer el mejor café del mundo”, afirmó.