Avanza reforma laboral: aprendices del Sena recibirán salario mínimo completo en fase práctica
Por: Elizabeth Montoya
17 octubre, 2024
La Cámara de Representantes aprobó el artículo 22 la reforma laboral, que garantiza mejores condiciones salariales para los estudiantes del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA). La medida, que beneficiará a más de 440,000 aprendices, establece el pago del 60% del salario mínimo durante la fase lectiva y un salario mínimo completo en la etapa práctica.
La ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez, celebró la decisión: “Este es un acto de reconocimiento a los y las aprendices en todo el país. Dignificamos la importante labor que desempeña la juventud trabajadora”, destacó tras la aprobación que contó con 94 votos a favor.
El debate también dio luz verde al artículo 23, que impone sanciones a empresas que incumplan con la cuota de aprendices, estableciendo una multa de 1.5 salarios mínimos por cada aprendiz faltante, pagaderos al SENA.
Sin embargo, la jornada estuvo marcada por controversias. Los artículos 31, 32 y 33, relacionados con el sector agropecuario, fueron eliminados del proyecto. El presidente Gustavo Petro manifestó su preocupación: “Entre más se afecte el nivel de vida de campesinos y jornaleros en el país, más crecerán las economías ilícitas y la violencia”.
El representante Carlos Felipe Quintero explicó la situación: “Estamos de acuerdo en que se formalice el campo, pero también pedimos una ayuda al Gobierno a través de subsidiar la seguridad social de empresas pequeñas en este sector, pero no se pudo y se eliminaron estos artículos”.
La reforma encara ahora un nuevo desafío con la incorporación de 140 artículos adicionales, de los cuales solo cinco cuentan con aval inicial. El presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, anunció la creación de una subcomisión para estudiar estas nuevas propuestas, mientras el proyecto alcanza un 90% de aprobación en su segundo debate.
Las discusiones continuarán este 17 de octubre, con especial atención a temas pendientes como la automatización y descarbonización, mientras el legislativo busca equilibrar las demandas del sector productivo con las necesidades de los trabajadores colombianos.