El presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Ednaldo Rodrigues, ha calificado los casos de violación protagonizados por los exjugadores Robinho y Daniel Alves como “nefastos” para el fútbol brasileño, expresando su apoyo a las víctimas involucradas.

En una declaración emitida durante su visita a Londres para asistir a un amistoso contra Inglaterra, Rodrigues condenó enérgicamente la conducta de los exfutbolistas, calificándola como vergonzosa y perversa. Además, lamentó que los deportistas creyeran que su estatus los protegería de las consecuencias de sus acciones.

El máximo dirigente de la CBF destacó la importancia de que las víctimas denuncien estos crímenes y que su valentía sirva de inspiración para otras mujeres que enfrenten situaciones similares.

Robinho, exjugador de equipos como Real Madrid, Manchester City y AC Milan, fue condenado a nueve años de prisión por su participación en una violación grupal a una joven albanesa en una discoteca de Milán en 2013. Por su parte, Daniel Alves fue condenado en primera instancia a cuatro años y medio de cárcel por agresión sexual en una discoteca de Barcelona en 2022.

A pesar de las condenas, los clubes y figuras del fútbol brasileño han guardado silencio sobre estos casos, generando críticas en redes sociales y medios de comunicación. La presidenta del Palmeiras, Leila Pereira, fue una de las primeras en pronunciarse, denunciando la falta de acción por parte de la industria futbolística.

Ante la presión social, Rodrigues afirmó que las condenas a Robinho y Alves marcan el fin de un triste capítulo en el fútbol brasileño y reiteró el apoyo de la CBF a las víctimas de estos crímenes. Reconoció que el machismo sigue siendo un problema en el deporte y llamó a los hombres a combatir todas las formas de violencia, incluida la violencia sexual.