El cuerpo sin vida de Manuela Sofía Villota, la adolescente de 16 años que permanecía desaparecida desde el 17 de noviembre, fue encontrado este miércoles 19 de noviembre en el río Chocho, sector Pedregal del municipio de Tibacuy, Cundinamarca. La joven fue arrastrada por una creciente súbita cuando el vehículo en el que viajaba con varios familiares fue sorprendido por la corriente en zona rural de Silvania.

La Delegación Departamental de Bomberos de Cundinamarca reportó inicialmente el hallazgo de uno de los cuerpos desaparecidos en el río que atraviesa la zona de Las Granjas, jurisdicción de Tibacuy, cerca del sector conocido como Club del Bosque. Este punto se había convertido en foco principal de búsqueda debido al aumento del caudal.

El gobernador de Cundinamarca, Jorge Emilio Rey, confirmó posteriormente la identidad de la víctima a través de su cuenta en X. “Acompañamos con toda nuestra solidaridad a su familia en este dolor inmenso”, escribió el mandatario departamental.

Las labores de búsqueda iniciaron a las 11:00 de la mañana y se extendieron hasta la tarde. En el operativo participaron Bomberos Fusagasugá, el grupo Ponalsar, el BIAD-80 y la Unidad Departamental de Gestión del Riesgo. Tras la recuperación, el cuerpo fue entregado al CTI para los procedimientos judiciales correspondientes.

La emergencia se originó por las fuertes lluvias registradas en la provincia del Sumapaz, que generaron situaciones críticas simultáneas en los municipios de Silvania y Tibacuy. Según el capitán Álvaro Farfán, delegado departamental de Bomberos de Cundinamarca, la intensa precipitación desencadenó una creciente súbita en la quebrada Yayata y en la vereda El Hato.

En una primera fase, las autoridades atendieron inundaciones en el barrio La Esperanza de Silvania, donde al menos cinco viviendas resultaron afectadas por el ingreso de agua y lodo.

La situación más crítica se presentó en la vereda El Hato, donde un vehículo que transportaba a cinco personas de una misma familia fue sorprendido por la fuerza de la corriente de la quebrada. Una persona logró escapar del automóvil antes de ser arrastrado, mientras que los otros cuatro ocupantes fueron llevados aguas abajo por la creciente.

Con el hallazgo de Manuela Sofía Villota, ya son dos las víctimas mortales confirmadas de esta emergencia climática. Durante las primeras horas de búsqueda, los equipos de emergencia habían recuperado el cuerpo de Segundo Villota, un adulto mayor que también viajaba en el vehículo.

Continúan desaparecidas Ana Lucía Villota Escandón, de 45 años, y Teresa Escandón, de 65 años, quienes también se encontraban entre los ocupantes del automóvil arrastrado por la creciente súbita de la quebrada El Hato el pasado 17 de noviembre.

Con información de bluradio