El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, criticó duramente a YouTube tras la eliminación de su canal oficial, que contaba con más de 233.000 suscriptores, y acusó a los dueños de la plataforma de ser “imbéciles imperialistas” condenados al “fracaso”. El mandatario aseguró que, pese a la medida, sus discursos continúan circulando en la red a través de cuentas alternas.

“Los dueños de YouTube fracasaron, la gente me sigue viendo por YouTube. Quiten todas las cuentas de mí que les dé la gana, imbéciles imperialistas”, declaró en un mensaje transmitido por Venezolana de Televisión (VTV).

No es la primera vez que la plataforma de videos restringe canales vinculados al oficialismo venezolano. En 2020, YouTube suspendió la cuenta principal de VTV y posteriormente eliminó el programa del entonces presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, que contaba con cerca de 100.000 suscriptores.

La nueva suspensión afecta directamente al canal de Maduro, lo que, según el propio mandatario, no impedirá que sus mensajes sigan siendo difundidos. “Mientras más censura, más llega el mensaje. Sigan con la censura, imbéciles imperialistas de YouTube, los felicito a los que tomaron la decisión, bono de productividad por imbéciles, a toditos”, expresó con ironía.

La decisión de la plataforma ocurre en medio de un escenario de alta tensión entre Estados Unidos y Venezuela. Washington ha intensificado su despliegue militar en el mar Caribe, donde sus fuerzas han atacado embarcaciones que, de acuerdo con el Gobierno estadounidense, estarían vinculadas al narcotráfico.

Estas operaciones han generado debate incluso dentro de Estados Unidos. Algunos congresistas han cuestionado la legalidad de los bombardeos al considerar que los buques atacados no constituyen “objetivos militares” y que no existe una declaración formal de guerra entre los países.

La eliminación del canal de Maduro se suma a una serie de sanciones y restricciones que desde hace varios años han marcado la relación entre Caracas y plataformas tecnológicas internacionales. El Gobierno venezolano ha denunciado reiteradamente lo que califica como un “bloqueo comunicacional” contra sus voceros y medios oficiales.

Por ahora, ni YouTube ni su empresa matriz, Google, han emitido un pronunciamiento oficial sobre la medida. Entretanto, el chavismo insiste en que sus mensajes seguirán llegando a la audiencia a través de otros canales digitales y medios estatales.