El presidente Gustavo Petro replanteó a través de la red social X la necesidad de una reforma constitucional en Colombia, tras la controversia generada por la elección de Carlos Camargo como magistrado de la Corte Constitucional. El mandatario descartó cualquier intención reeleccionista y definió los ejes centrales que debería abordar esta transformación.

Petro especificó cuatro temas fundamentales que requieren modificaciones constitucionales: las reformas sociales, la adaptación al cambio climático, la garantía de los derechos ciudadanos y la reforma al sistema de justicia “para que cese la impunidad y sea la verdad y la restauración de las víctimas”.

El presidente justificó esta propuesta señalando que “indudablemente la forma de elección de un magistrado que produce una estela de clientelismo en sus últimos años para llegar a esa posición, demuestra la pertinencia tanto de las reformas sociales, como de la reforma a la justicia para que sea poderosa y no clientelar”.

En su evaluación del poder legislativo, Petro aseguró que “con un Congreso como el que eligió el pueblo en el año 2022 no son posibles reformas más avanzadas”. Según el mandatario, aunque se logró aprobar la reforma laboral y pensional, “la forma de elección del Congreso de tipo clientelar lo limita para asumir más retos democráticos”.

El presidente criticó específicamente que el Congreso “paralizó la reforma a la salud, en medio de la crisis financiera de las EPS” y eligió un magistrado que, en su opinión, “ayudará a deshacer lo que logró la Cámara de Representantes en la Pensional”.

La Constitución colombiana establece tres vías para realizar reformas constitucionales. La primera es mediante acto legislativo presentado por el Gobierno, diez miembros del Congreso, el 20% de concejales o diputados, o ciudadanos equivalentes al 5% del censo electoral.

La segunda opción es una Asamblea Constituyente, donde el Congreso mediante ley puede disponer que el pueblo decida en votación popular si convoca esta instancia.

El tercer mecanismo es el referendo, que requiere seis meses para recolección de firmas según formularios de la Registraduría Nacional y aprobación con voto afirmativo de más de la mitad de los sufragantes.

Ante especulaciones sobre motivaciones reeleccionistas, Petro fue categórico: “cada vez que hablo de la necesaria constituyente, sacan a relucir la reelección”. El mandatario descartó esta posibilidad afirmando que “ya no hay tiempo de reelección, así que sacó el tema de nuevo”.

El presidente indicó que este proceso constituyente “depende de las firmas de la ciudadanía y del nuevo Congreso que se elija”, sugiriendo que la viabilidad de la propuesta estará condicionada a los resultados de las próximas elecciones legislativas.

En su reflexión sobre la gestión actual, Petro sostuvo que “avanzamos bastante; a pesar del ocultamiento de la prensa, los logros son evidentes, pero hay que avanzar más en la construcción del estado social de derecho, que el nuevo magistrado no se atrevió ni a pronunciar”.

La propuesta presidencial surge en un contexto de tensiones institucionales y representa un llamado a transformaciones estructurales que requerirían amplio respaldo ciudadano y político para materializarse a través de cualquiera de los mecanismos constitucionales establecidos.

Con información de asuntos legales y caracol radio