Caracol Radio confirmó la identidad de los dos hombres capturados por su presunta participación en el atentado con camión bomba que sacudió Cali en inmediaciones de la base aérea Marco Fidel Suárez. Se trata de Walter Esteban Yonda Ipía, de 23 años, oriundo de Corinto (Cauca), y Carlos Steven Obando Aguirre, de 26 años, natural de Cali.

El ataque terrorista dejó un saldo de siete personas muertas y más de 70 heridas, generando conmoción en la capital del Valle del Cauca.

La tarde del viernes 22 de agosto se desarrollarán las audiencias preliminares para legalizar la captura de ambos sujetos. La Fiscalía General evaluará la imputación de cargos por los delitos de terrorismo, homicidio y porte ilegal de armas, municiones de uso privativo de las fuerzas armadas y explosivos.

Los equipos de la Fiscalía y la Policía Judicial de la Dirección Especializada contra las Organizaciones Criminales cuentan con elementos materiales probatorios que vinculan a la estructura ‘Jaime Martínez’, perteneciente a las disidencias de alias Iván Mordisco, con el hecho violento registrado en Cali.

Las autoridades también relacionan al Frente 36 del autodenominado ‘Estado Mayor Central’ con el derribo de un helicóptero de la Policía ocurrido en Amalfi, Antioquia, evidenciando una escalada de violencia por parte de grupos armados ilegales en diferentes regiones del país.

El secretario de Gobierno de Cali, Diego Fernando Hau, rechazó categóricamente el atentado perpetrado en inmediaciones de la base aérea militar. Durante su intervención en el programa 6AM, Hau cuestionó la permisividad del gobierno nacional hacia los grupos armados que están atacando a los colombianos.

El funcionario destacó un detalle particular sobre uno de los capturados: “La persona que ha sido capturada, como posible delincuente terrorista, que lideró esto, tenía brackets, lo que quiere decir que tiene tiempo suficiente y tranquilidad para ir al médico, para sentarse dos horas con un odontólogo para que le instalen y mejoren su sonrisa”.

Hau utilizó esta observación para cuestionar la narrativa de que estos grupos operan desde la selva en condiciones precarias: “Aquí los tenemos tranquilos, yendo al odontólogo a recuperar su sonrisa”.

El atentado ha generado un panorama de incertidumbre y dolor en Cali, donde seis personas perdieron la vida y 76 resultaron gravemente heridas según el balance más reciente. La comunidad vallecaucana enfrenta las consecuencias de este acto terrorista que ha conmocionado tanto a nivel local como nacional.

Con información de caracol radio