La Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia encontró responsable al general en retiro Rodolfo Palomino del delito de tráfico de influencias en servidor público. La decisión judicial, que será leída en su totalidad el próximo 14 de agosto a las 2:00 de la tarde, conllevará una condena de entre 5 y 12 años de prisión no excarcelable.

El caso se remonta a 2014, cuando Palomino ejercía como director de la Policía Nacional. En esa época, el general visitó en su domicilio a la fiscal Sonia Lucero Velásquez, en una reunión que la Corte calificó como “inusual” y que la propia funcionaria consideró sospechosa desde el primer momento.

La fiscal tomó la decisión de grabar la conversación, registro que posteriormente se convirtió en prueba clave durante el proceso judicial. En esa grabación quedó documentada la “propuesta indecente” o “sugerencia” que presentó Palomino para evitar la captura del empresario Luis Gonzalo Gallo.

Luis Gonzalo Gallo estaba siendo investigado por presunta participación en el despojo de tierras en Tulapas, Córdoba, durante los años noventa. Las investigaciones señalaban su posible alianza con los paramilitares de la Casa Castaño mientras formaba parte del Fondo Ganadero de Córdoba.

Durante la conversación grabada, Palomino describió a Gallo como un hombre con “poder” y vínculos cercanos a varios expresidentes. El entonces director de la Policía advirtió que la detención del empresario sería “muy grave”, evidenciando su intención de interferir en el cumplimiento de la orden de captura emitida por la Fiscalía.

La Sala otorgó plena validez a la grabación realizada por la fiscal Velásquez y otorgó credibilidad a su testimonio. Los magistrados determinaron que Palomino se apartó de su deber institucional y actuó deliberadamente para obstaculizar el cumplimiento de una orden judicial.

La decisión judicial establece que el general, aprovechando su posición como director de la Policía Nacional, intentó influir indebidamente en el proceso investigativo en favor del empresario investigado.

Tras la lectura completa del fallo programada para el 14 de agosto, se procederá a la individualización de la pena. En este momento se definirá si Palomino deberá cumplir su condena en un centro carcelario. Hasta tanto no se concrete este proceso, el general permanecerá en libertad.

La condena podría agravarse considerando el alto cargo que ocupaba el oficial en el momento de los hechos. Como director de la Policía Nacional, Palomino tenía responsabilidades institucionales que fueron vulneradas según la determinación judicial.

La defensa del general en retiro podrá apelar la decisión ante la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, que actuará como segunda instancia en este proceso. Esta instancia superior revisará tanto los aspectos probatorios como los jurídicos de la condena.

El recurso de apelación representa la última oportunidad procesal para que la defensa de Palomino pueda revertir o modificar la decisión de primera instancia.

Con información de bluradio