Un grupo de soldados del Ejército Nacional fue víctima de un ataque armado en la vereda El Moral, zona rural del municipio de Chita, departamento de Boyacá, mientras desarrollaban labores de infiltración dentro de la operación militar denominada Aquiles.

El ataque se registró a las 11:10 de la noche, cuando las tropas militares fueron sorprendidas por disparos de fusil y granadas después de cuatro días de operaciones de infiltración en la zona. El saldo preliminar del enfrentamiento arrojó tres soldados profesionales muertos y tres uniformados heridos.

Las víctimas fatales fueron identificadas como Durley Ascencio Tapiero, oriundo de Montañita, Caquetá; Andrés Felipe Arias Ponce, natural de Córdoba, Bolívar; y Jaider Miguel Mercado Meléndez, procedente de Ciénaga, Magdalena. Los tres militares tenían edades comprendidas entre 21 y 24 años.

Los soldados fallecidos pertenecían a la unidad Artillero 4, orgánica del BAACA1 y agregada operacionalmente al BAMGU2. Esta unidad se encontraba desplegada bajo las órdenes del subteniente Suárez Mora Marlon en el marco de las operaciones militares en la región.

El Ejército reportó tres uniformados heridos durante el ataque. Uno de ellos sufrió lesiones por esquirlas en la mano izquierda y el rostro, mientras que otro militar resultó con impactos en ambos hombros y en el glúteo izquierdo. El tercer herido presenta lesiones en la pierna izquierda, específicamente a la altura de la ingle.

Tras los hechos violentos, las autoridades militares activaron protocolos de respuesta inmediata. Se informó al comando superior sobre la situación y se estableció coordinación con los servicios de salud de los municipios de Jericó y Chita para facilitar la extracción médica de los soldados heridos.

Adicionalmente, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de Socha inició actos urgentes con el objetivo de avanzar en el proceso de judicialización contra los responsables del ataque armado.

El ataque se produjo mientras las tropas desarrollaban labores dentro de la operación militar Aquiles en territorio boyacense. Esta ofensiva forma parte de las estrategias del Ejército Nacional para mantener el control territorial y combatir grupos armados ilegales en zonas rurales del país.

Con información de bluradio