La reforma laboral aprobada por el Congreso colombiano genera preocupación en el sector de servicios de aseo, donde se estima que podrían perderse hasta 10.000 empleos debido a los sobrecostos que implican los nuevos cambios normativos, según advirtió María del Pilar Rodríguez, directora ejecutiva de Fenaseo.

Entre las modificaciones más significativas implementadas se encuentra la ampliación de la jornada diurna, que ahora comprende desde las 6:00 a.m. hasta las 7:00 p.m., estableciendo el trabajo nocturno entre las 7:00 p.m. y las 6:00 a.m.

La reforma también establece incrementos graduales en la remuneración por trabajo en días de descanso obligatorio y festivos. A partir del 1° de julio de 2025, el recargo se incrementará a 80% sobre el salario ordinario. Esta cifra aumentará a 90% desde julio de 2026, hasta alcanzar el 100% en julio de 2027, aplicándose en proporción a las horas laboradas.

Fenaseo, la federación que agrupa empresas de aseo con operaciones en centros comerciales, clínicas y bancos, representa un sector que emplea principalmente a 400.000 mujeres cabeza de familia. Según Rodríguez, la nueva normativa presenta un dilema operativo: “reducimos dos horas laborales, pero por el otro, debemos sumar horas extras”.

La directiva ejemplificó la situación con un caso concreto: un contrato de aseo que anteriormente costaba $200 ahora requiere un incremento a $220, representando un sobrecosto de $20 por las nuevas disposiciones laborales.

Los clientes del sector, especialmente centros comerciales, enfrentan dificultades para absorber estos incrementos. “Los centros comerciales me dicen, no podemos cobrar más cuota de administración para pagar el servicio de aseo porque los locales comerciales no están vendiendo lo suficiente”, explicó Rodríguez.

La ejecutiva describió el comportamiento actual del consumo: “Los colombianos hoy en día vamos al centro comercial a comer helado y a pasear el perro, pero compras no estamos haciendo”.

Ante la imposibilidad de trasladar los costos adicionales, los clientes optan por reducir el personal de limpieza. “Si subo $20, me dice reduzca 14 señoras de aseo”, señaló Rodríguez, ilustrando cómo los sobrecostos se traducen directamente en pérdida de empleos.

Esta dinámica genera una sobrecarga laboral para quienes conservan sus puestos: “Quien se queda el puesto de trabajo, trabajará más, cubriendo las vacantes de quienes salen por este sobre costo”.

Fenaseo estima que la pérdida de 10.000 empleos ocurrirá de manera progresiva entre el 30 de julio y enero del próximo año. La organización espera poder absorber parte de este impacto, aunque reconoce las limitaciones del contexto económico actual.

La directora ejecutiva destacó que la economía colombiana no presenta suficientes oportunidades alternativas: “Lamentablemente nuestra economía no está creciendo, no están creándose más universidades, más colegios, más centros comerciales, más clínicas, donde pudiesen esas mujeres que quedan desocupadas ir a conseguir trabajo”.

Fenaseo advierte sobre un posible incremento en la informalidad del sector. “Habrá quien dice, no pago una operaria con todas las leyes y le ofrezco $20.000 por el día, porque le parece más barato que contratar a una compañía seria”, explicó Rodríguez.

Este escenario amenaza con desplazar a empresas formales que cumplen la normativa laboral vigente, generando competencia desleal en el mercado de servicios de aseo.

Con información de la república