Un nuevo ataque con dron en la región del Catatumbo, Norte de Santander, dejó un menor de 12 años muerto y 12 personas heridas. El incidente ocurrió el jueves 15 de mayo de 2025 en la vereda 20 de Julio del municipio de Tibú, en medio de los enfrentamientos que sostienen el ELN y las disidencias de las FARC por el control territorial.

La Asociación Campesina del Catatumbo (Ascamcat) confirmó el fallecimiento de Luis Antonio Aragón Vaca, un niño campesino de 12 años, quien se encontraba durmiendo cuando se perpetró la acción. En el mismo ataque resultó herida su madre, Marli Floredis Aragón Vaca.

Entre las 12 personas heridas se identificaron a Edgar Giovanny Contreras, Flor María Contreras, Leonardo Estiven Garavito, Jeiler Jhoan Contreras, Maryury Raquel Ortega, Deisy Girenis Contreras, Roque Julio Ortega, Jhoana Vargas, Dainer Ortega, Daira Julieth Ortega y Dayly Giret Ortega.

El ministro de Defensa, Pedro Sánchez Suárez, atribuyó el ataque al ELN a través de su cuenta en la red social X: “La información que tenemos en este momento es que el jueves 15 de mayo de 2025, en horas de la noche, integrantes del cartel narcotraficante del ELN asesinaron a un niño de 12 años y habrían dejado heridos a cuatro civiles en la vereda 20 de Julio, municipio de Tibú, Norte de Santander”.

El funcionario agregó que “este cobarde ataque del ELN contra los civiles fue perpetrado con drones armados que arrojaron explosivos de forma indiscriminada sobre una comunidad que quiere dejar atrás los cultivos para uso ilícito, y avanzar hacia la paz, la legalidad y una vida digna”.

Ascamcat rechazó el ataque mediante un comunicado: “La Asociación Campesina del Catatumbo rechaza esta acción que viola flagrantemente los derechos humanos y el derecho internacional humanitario. La utilización de drones en áreas civiles pone en riesgo la vida de personas inocentes, especialmente niños y niñas, y causa daños irreparables a las comunidades afectadas”.

La región del Catatumbo lleva cuatro décadas afectada por la presencia de grupos armados ilegales y el narcotráfico. La crisis actual se agudizó a mediados de enero cuando el ELN lanzó una ofensiva contra el Frente 33 de las disidencias de las FARC por el control territorial, dejando a la población civil rural en medio del fuego cruzado.

Este incidente se suma a otros ataques recientes. El pasado martes, un soldado del Ejército Nacional murió en otro ataque con dron cargado de explosivos también atribuido al ELN en el mismo departamento.

Según los últimos datos de la Defensoría del Pueblo colombiano, el recrudecimiento de la violencia en el Catatumbo ha dejado ya 117 muertos y más de 64.000 personas desplazadas, situación calificada como la “peor crisis de derechos humanos de los últimos años” en Colombia.

Con información de caracol radio y swissinfo