Nueva teoría ubica el Jardín del Edén bajo la Gran Pirámide de Guiza

Por: Maria Jose Salcedo

3 mayo, 2025

La teoría de Borisov propone una reubicación del paraíso bíblico a 1.500 kilómetros de su localización tradicional en Mesopotamia. Foto: Bildagentur-online/Rossi/picture alliance

La búsqueda del mítico Jardín del Edén ha dado un giro inesperado. Mientras que durante siglos los expertos han ubicado este paraíso bíblico en Mesopotamia, donde confluyen el Tigris y el Éufrates en el actual Irak, una nueva investigación publicada en Archaeological Discovery plantea una teoría alternativa: el Edén podría haber estado en Egipto, específicamente bajo la Gran Pirámide de Guiza.

El ingeniero informático Konstantin Borisov, autor del estudio, fundamenta su hipótesis en el análisis de un mapa del año 500 a.C., donde aparecen cuatro grandes ríos —el Nilo, el Tigris, el Éufrates y el Indo— que nacen en lo que las civilizaciones antiguas denominaban “Oceanus”. Según Borisov, esta disposición coincidiría con la descripción del Génesis 2:8-14, que menciona un río principal que se divide en cuatro corrientes: Pishon, Gihon, Tigris y Éufrates.

“Examinando el mapa de reconstrucción del mappa mundi de Hecataeus, resulta evidente que los únicos cuatro ríos que emergen del Oceanus circundante son el Nilo, el Tigris, el Éufrates y el Indo”, sostiene Borisov en su investigación. El estudio sugiere además que el río bíblico Gihon correspondería al Nilo, una conexión que, según el investigador, estaría respaldada por los escritos del historiador Flavio Josefo.

Para reforzar su teoría, Borisov también analiza el mapamundi de Hereford, un importante mapa del siglo XIII que sitúa el “Paraíso” cerca del río Oceanus. La combinación de estos análisis geográficos con elementos mitológicos hace que, según el investigador, Egipto sea un candidato más convincente para la ubicación del Edén que Mesopotamia.

La Gran Pirámide como el Árbol de la Vida

Quizás el aspecto más llamativo de la hipótesis es la conexión que establece entre la Gran Pirámide de Guiza y el árbol de la vida bíblico. Borisov observa que los patrones de luz en la Cámara del Rey de la pirámide, según simulaciones por ordenador realizadas en 2012, se asemejan notablemente al resplandor de un árbol.

“No se puede pasar por alto que las partículas cargadas de esta simulación están dispuestas de tal forma que crean varias ramas paralelas que se extienden hacia fuera desde la línea central, creando una representación similar a un árbol”, explica el investigador.

La teoría propone que el propio árbol de la vida podría ser una representación simbólica de la Gran Pirámide. Borisov señala que “en las culturas antiguas, egipcia, acadia, asiria, babilónica, india, persa, china y griega, existía el concepto de la montaña sagrada del mundo sobre la que se creía que estaba situado el árbol de la vida”.

Escepticismo en la comunidad científica

Como era de esperar, esta teoría ha sido recibida con una mezcla de curiosidad y escepticismo en círculos académicos. Los críticos señalan que muchas de las ideas en las que se basa el estudio priorizan las conexiones simbólicas y las interpretaciones especulativas por encima de evidencias arqueológicas concretas.

La mayoría de los arqueólogos consideran estas conjeturas como pseudocientíficas, recordando la famosa frase de Carl Sagan: “las afirmaciones extraordinarias requieren pruebas extraordinarias”.

Cabe destacar que a lo largo de la historia se han propuesto numerosas ubicaciones para el Jardín del Edén, desde Irán e Israel hasta lugares tan distantes como Florida y Mongolia. La fe mormona incluso lo sitúa en el condado de Jackson, Misuri.

Ya sea un lugar geográfico literal o un poderoso relato mitológico, la búsqueda del “paraíso original de la humanidad” continúa inspirando nuevas exploraciones e interpretaciones de nuestro pasado, demostrando que la fascinación por el Jardín del Edén sigue tan vigente como siempre.

 

 

Con información de dw