El bombeo de petróleo en el oleoducto Bicentenario fue suspendido tras un ataque con explosivos registrado en zona rural del municipio de Fortul, departamento de Arauca. Las Fuerzas Militares atribuyeron este atentado al Ejército de Liberación Nacional (ELN).

Según informó Cenit, filial de Ecopetrol encargada del transporte de hidrocarburos, el ataque no dejó víctimas fatales ni heridos. “El Ejército Nacional se encuentra asegurando la zona para garantizar el ingreso del personal técnico que atenderá la situación”, señaló la compañía en un comunicado oficial.

El oleoducto Bicentenario, considerado uno de los más importantes de Colombia, cuenta con una extensión de 230 kilómetros y capacidad para transportar hasta 150.000 barriles diarios de crudo en promedio. Esta infraestructura conecta la estación Araguaney, en el departamento de Casanare, con la estación Banadía en Arauca, donde enlaza con el Oleoducto Caño Limón-Coveñas.

La guerrilla reanudó su ofensiva contra la infraestructura petrolera del país después de que el presidente Gustavo Petro suspendiera en enero las negociaciones de paz, tras una escalada de ataques en la región del Catatumbo, en la frontera con Venezuela.

Este conflicto en la zona fronteriza ha dejado hasta el momento un centenar de muertos, más de 64.000 personas desplazadas y otras 13.000 en situación de confinamiento. El departamento de Arauca ha sido uno de los territorios que ha recibido mayor número de víctimas producto de esta violencia.

El ataque al oleoducto Bicentenario ocurre en paralelo a la reciente suspensión de operaciones militares ofensivas y operaciones especiales de Policía contra los bloques del frente Raúl Reyes de las FARC en el Catatumbo. Según expresó el mandatario, esta decisión se tomó porque “la paz con estas estructuras será una realidad”.

Los ataques contra oleoductos han sido una estrategia recurrente del ELN durante décadas, como parte de sus hostilidades en el marco de un conflicto interno que se ha extendido por más de seis décadas y ha dejado un saldo de más de 450.000 muertos en Colombia.

Autoridades y personal técnico continúan evaluando los daños causados por el atentado para determinar cuándo podrán restablecerse las operaciones normales en esta importante infraestructura petrolera del país.

Con información de la república, Reuters y lafm