La Policía del Meta detuvo el pasado 28 de noviembre a Wilton Sáenz, padrastro de Sara Camacho, la niña de cinco años que fue abusada y asesinada el 18 de noviembre en Guamal. La captura, resultado de una investigación coordinada entre la Policía Nacional, la Sijin y el CTI de la Fiscalía, se realizó luego de recopilar pruebas determinantes sobre el crimen que conmocionó a la comunidad.

Según la información proporcionada por un vocero de la Policía, la menor fue encontrada sin vida en la vereda Santa Bárbara, en el municipio de Guamal. Las pesquisas, apoyadas en resultados de Medicina Legal, revelaron que Sara Camacho murió por asfixia mecánica y fue víctima de acceso carnal abusivo.

Con base en estos hallazgos, la Fiscalía solicitó una orden de captura contra Wilton Sáenz por los delitos de feminicidio agravado y acceso carnal abusivo agravado, orden que fue ejecutada en horas de la noche del 28 de noviembre. Sáenz fue presentado posteriormente ante un juez de control de garantías.

Tras la detención, Sandra Ortiz, hermana de Wilton Sáenz, compartió un mensaje en redes sociales en el que relató cómo contribuyó a que su hermano se entregara, evitando que fuera víctima de linchamientos por parte de la comunidad.

“Uno nunca piensa que un hermano va a cometer un error de esos. Le pregunté muchas veces si era culpable, pero él siempre negó haber estado implicado”, expresó Ortiz.

En su testimonio, Ortiz explicó que decidió entregarlo personalmente a las autoridades para prevenir una tragedia mayor. “Yo fui personalmente a entregarlo, como hermana lo hice para evitar una tragedia… No lo hice por defenderlo ni porque esté unida a él, lo hice de corazón porque es mi hermano”, afirmó.

El caso ha generado indignación en Guamal, donde los vecinos intentaron linchar a Sáenz y prendieron fuego a la vivienda donde residía. Ante estos hechos, Sandra Ortiz pidió calma y enfatizó que las acciones de su hermano no representan a toda su familia.

“Si mi hermano la embarró, fue él, no somos toda la familia”, declaró. Además, hizo un llamado a las familias para estar atentas a posibles señales de alerta en los hogares. “Hoy fue con Sara, mañana no sabemos que sea con alguno de nuestros hijos”, concluyó.