Armando Benedetti, actual embajador de Colombia ante la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), ha estado en el centro de la atención mediática en los últimos meses. Aunque oficialmente continúa como embajador en Roma, se conoció que estaría actualmente en Barranquilla, hecho que ha suscitado dudas sobre su continuidad en el cargo y sus objetivos políticos a futuro.

Uno de los principales focos de atención sobre Benedetti es el avance de una investigación en la Corte Suprema de Justicia relacionada con el caso Fonade. Este proceso involucra a excongresistas como Bernardo “Ñoño” Elías y Musa Besayle, quienes ya fueron condenados. Según fuentes judiciales, la Sala de Instrucción de la Corte estaría considerando imputarle cargos al embajador por delitos relacionados con este caso.

Además, Benedetti enfrenta otra investigación que cuestiona la transparencia de su patrimonio, incluyendo bienes como una casa en Puerto Colombia, apartamentos en Barranquilla y Bogotá, y transferencias al exterior realizadas cuando ejercía como senador. Sin embargo, hasta la fecha, ninguno de estos procesos ha derivado en decisiones judiciales concretas.

La vida personal del político también ha estado en el ojo público. Recientemente, Benedetti estuvo involucrado en un altercado con su pareja, Adelina Guerrero, en Madrid, lo que llevó a la apertura de una investigación en su contra. Aunque en su momento Guerrero decidió regresar a Colombia y distanciarse, actualmente se encuentran juntos, lo que explica parte de la permanencia del embajador en Barranquilla.

Rumores sobre encuentros políticos

Versiones no confirmadas sugieren que Benedetti podría haberse reunido recientemente con el presidente Gustavo Petro en la casa de Nicolás Petro, hijo del mandatario. De ser cierto, Nicolás Petro habría violado las restricciones impuestas por la medida de aseguramiento que enfrenta en un caso de lavado de activos, pues le está prohibido interactuar con personas relacionadas con sus declaraciones, como Benedetti.

En este contexto, fuentes cercanas al Palacio de Nariño aseguran que el presidente Petro está considerando reestructurar su equipo político para el último año de su mandato, buscando rodearse de aliados clave, entre ellos Benedetti, quien fue fundamental en la campaña presidencial en la costa Atlántica.

Pese a los rumores sobre su posible regreso a un cargo gubernamental, una fuente cercana al político aseguró que Benedetti no estaría pensando en ocupar posiciones en el Gobierno. Sin embargo, en el pasado, el embajador expresó interés en dirigir el Ministerio del Interior, un cargo estratégico que desempeñó Juan Fernando Cristo y que podría quedar vacante si este último decide aspirar a la presidencia en 2026.