El Senado de la República de Colombia se vio obligado a anular la elección del nuevo magistrado de la Corte Constitucional este lunes 18 de noviembre, después de detectar irregularidades en el proceso de votación que arrojó un empate entre los candidatos Claudia Dangond y Miguel Efraín Polo.

La controversia surgió cuando la comisión escrutadora encontró 103 votos en la urna, superando el cuórum establecido para la corporación en un sufragio. El resultado inicial mostraba 50 votos para cada uno de los principales candidatos, además de dos votos en blanco y una tarjeta electoral sin marcar.

“Asumo la confianza que depositaron en mí con responsabilidad y con gratitud, como abogada, como mujer y como madre, estoy lista para garantizar el valor de la justicia”, había manifestado Dangond durante su intervención ante el Senado. Por su parte, Polo había enfatizado que “no puede existir ningún poder que afecte la autonomía, independencia y existencia del Congreso por su rol fundamental como institución que representa la voluntad ciudadana”.

El presidente del Senado, Efraín Cepeda, anunció que se implementarán nuevas medidas de seguridad para la próxima votación, incluyendo el diseño de nuevos tarjetones y una metodología actualizada. Además, se solicitó la revisión de las cámaras de seguridad del recinto para investigar el origen del voto adicional.

La situación generó tensiones entre los legisladores. La senadora Isabel Zuleta, del Pacto Histórico, cuestionó el manejo del proceso: “Las irregularidades en la elección del nuevo magistrado son evidentes. No han sometido a votación la apelación de levantar la sesión”.

En contraste, la senadora Paloma Valencia del Centro Democrático respaldó la decisión de suspender la sesión: “La decisión del presidente Cepeda era la correcta, levantar la plenaria, investigar el fraude que se pretendió hacer”, señaló a través de su cuenta en X.

El proceso de elección ha estado marcado por especulaciones sobre posibles influencias políticas, con rumores que señalan a Dangond como la candidata favorita de los sectores de oposición, mientras que Polo es percibido como el aspirante respaldado por el gobierno del presidente Gustavo Petro.