El presidente Gustavo Petro ha lanzado una alerta sobre la precaria situación financiera que enfrenta Colombia para hacer frente a la creciente crisis climática. Durante la firma del decreto de autoridad indígena, el mandatario expresó su preocupación por la escasez de recursos estatales para atender las emergencias ambientales que han azotado al país en los últimos dos años.

“Este Gobierno lleva dos años de catástrofes ambientales y ya no alcanza el dinero”, declaró Petro, poniendo de manifiesto la gravedad de la situación. El jefe de Estado destacó que los desastres naturales consecutivos han mermado significativamente la capacidad del gobierno para responder adecuadamente a las emergencias climáticas.

El presidente señaló los obstáculos que ha enfrentado su administración al intentar implementar medidas para recaudar fondos destinados a la mitigación y adaptación al cambio climático. “Cuando quisimos poner los impuestos sobre el carbón y el petróleo, que era lo lógico para adaptarnos a la crisis, pues suspendieron la ley”, explicó Petro, refiriéndose a la decisión de la Corte de suspender estos gravámenes que, según él, eran fundamentales para financiar la respuesta a la crisis climática.

Petro no dudó en señalar a quienes considera responsables de obstaculizar estas iniciativas: “Los defensores del capital fósil, que hoy aún tienen el poder en Colombia. No tienen el gobierno, pero tienen el poder. Porque gobernar no es tener el poder”, afirmó, subrayando la distinción entre ostentar cargos gubernamentales y ejercer influencia real sobre las políticas del país.

El mandatario aprovechó la ocasión para hacer un llamado a la unidad, no solo entre los pueblos del sur global, sino también con las fuerzas progresistas del norte. “La tarea inmediata, además de la unidad de los pueblos, que no son sólo los del sur, sino que tienen que vincular los pueblos progresistas del norte”, enfatizó Petro, sugiriendo la necesidad de una coalición internacional para abordar efectivamente la crisis climática.