EPM advierte riesgo de racionamiento energético para 2025 y 2026

Por: Maria José Salcedo

14 octubre, 2024

EPM advierte riesgo de racionamiento energético para 2025 y 2026

Empresas Públicas de Medellín (EPM) no descarta un posible racionamiento energético para los años 2025 y 2026. A pesar de que Hidroituango opera con sus cuatro turbinas y que las lluvias han aumentado en Antioquia, de acuerdo con John Maya Salazar, gerente general de la compañía, los niveles de los embalses aún no son suficientes para garantizar el abastecimiento en las próximas temporadas secas.

Hasta el 10 de octubre, los embalses de EPM registraban un nivel promedio del 48 %, un ligero aumento respecto a semanas anteriores, pero aún lejos del 65 % o 70 % que se requiere para asegurar la energía durante el próximo verano. El embalse de Guatapé, el más importante para la generación hidroeléctrica de la empresa, se encuentra al 49 %, un crecimiento modesto tras uno de los periodos más secos de los últimos 40 años, con bajos niveles de lluvias en agosto y septiembre.

El gerente de EPM destacó que otros embalses, como Porce II y Porce III, se encuentran en niveles más altos, con un 85 % de su capacidad, pero aclaró que estos embalses son más pequeños y su volumen se reduce rápidamente durante la generación de energía, lo que hace que Guatapé sea clave para la estabilidad energética de la región.

La matriz energética y los desafíos actuales

A nivel nacional, EPM aporta cerca del 30 % de la oferta energética al Sistema Nacional Interconectado (SIN), con Guatapé contribuyendo el 12 % de la generación total. A pesar de la importancia de la empresa en el sistema energético colombiano, la matriz hídrica de EPM no está bajo presión extrema, gracias a la reciente resolución de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg), que distribuyó la generación entre fuentes hidráulicas y térmicas. Actualmente, el 49 % de la energía proviene de fuentes hídricas y el 41 % de térmicas, aunque en condiciones normales, la proporción hídrica alcanza el 70 %.

Por otro lado, el panorama de abastecimiento de agua es más alentador. Maya Salazar indicó que el embalse de La Fe está al 80 % de su capacidad, mientras que Piedras Blancas y Rio Grande registran niveles del 53 % y 77 %, respectivamente, lo que asegura un mejor suministro de agua en la región.

El sector energético colombiano no solo enfrenta desafíos hídricos. La dependencia del gas para la generación térmica también plantea problemas. La posible necesidad de importar gas podría impactar los precios y agravar la situación. A pesar de que EPM no tiene contratos interrumpibles que hayan sido afectados por el reciente desabastecimiento, el gerente de la empresa advirtió que los contratos de gas deben ser renegociados antes del 1 de diciembre, y la incertidumbre sobre el abastecimiento de gas a largo plazo podría influir negativamente en el suministro energético.

Preocupación por las decisiones del Gobierno

El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, ha expresado su preocupación por un posible apagón debido a las decisiones del Gobierno Nacional en relación con los proyectos de generación hidráulica y la exploración de gas. Gutiérrez señaló que la estigmatización de estos proyectos, como Hidroituango, ha dificultado el desarrollo de nuevas infraestructuras energéticas de gran escala.

Además, el alcalde advirtió que la disminución en la exploración y explotación de gas podría generar caos en el sector energético y aumentar las tarifas del gas natural si el país se ve obligado a importar este recurso. Gutiérrez también destacó la importancia de seguir impulsando Hidroituango, un proyecto que ya aporta el 17 % de la energía del país y que, con la adición de cuatro nuevas unidades para 2027, aumentaría su capacidad en 1.200 megavatios, contribuyendo como un seguro energético para Colombia.

El riesgo de racionamiento energético está latente, y tanto EPM como las autoridades locales han instado al Gobierno Nacional a tomar medidas para prevenir esta crisis. A pesar de que durante el reciente Fenómeno de El Niño no se produjo un apagón gracias a la operación de Hidroituango, la situación actual demanda acciones coordinadas para asegurar el suministro de energía en el futuro.