El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, presentará este martes de manera oficial el programa “Bogotá Sin Hambre 2.0“, una iniciativa destinada a combatir el hambre en la capital de Colombia. Este programa, que forma parte del Plan de Desarrollo de la ciudad, busca implementar estrategias estructuradas y eficaces para abordar la inseguridad alimentaria, respondiendo así a las críticas recientes del presidente Gustavo Petro sobre la falta de apoyo de la Alcaldía a su propuesta de los Puntos de Abastecimiento Solidarios (PAS).

El presidente Petro había expresado públicamente su preocupación por la falta de inscripción de lotes por parte de las alcaldías de Bogotá y Medellín en su convocatoria para ofrecer terrenos destinados a los PAS, estructuras modulares donde las personas podrían acceder a alimentos baratos y restaurantes con comida gratuita. El mandatario solicitó a las comunidades pobres de ambas ciudades identificar lotes para implementar estos programas.

Gustavo Bolívar, exsenador y aliado de Petro, respaldó esta solicitud, señalando que él personalmente había contactado a las administraciones locales para coordinar el apoyo a los PAS. En un mensaje en X, Bolívar criticó que “disputas ideológicas” privaran a las personas más vulnerables del bienestar que podrían obtener con estos programas.

En respuesta a estas críticas, Galán defendió la gestión de su administración, argumentando que “el hambre no se combate con discursos ni con trinos, sino con programas serios, bien estructurados, eficaces y, sobre todo, que se ejecutan”. El alcalde resaltó que “Bogotá Sin Hambre 2.0” es un proyecto integral que ha sido diseñado para abordar el problema de la inseguridad alimentaria de manera sostenible.

¿En qué consiste “Bogotá Sin Hambre 2.0”?

El programa tiene varios pilares fundamentales, entre los que destacan la creación de 35 mil nuevos espacios para la comercialización de alimentos, el fortalecimiento del abastecimiento de la ciudad, y la expansión de los comedores comunitarios para alcanzar 46 mil cupos. Además, se plantea reducir el riesgo de desnutrición aguda en menores de 5 años, pasando del 12,7% actual al 12% para el final del cuatrienio.

Entre las estrategias del programa se incluyen el rediseño de los bonos alimentarios para personas con discapacidad y adultos mayores, la implementación de transferencias monetarias con un enfoque en el ingreso mínimo garantizado, y la adecuación de comedores comunitarios para poblaciones específicas, como adultos mayores y personas en condiciones de vulnerabilidad extrema.

El programa también busca replantear el modelo de los comedores comunitarios, concentrando estos recursos en las zonas más necesitadas y asegurando que los beneficiarios sean aquellos que no pueden prepararse o acceder a sus propios alimentos. La reestructuración busca una mayor eficiencia en la distribución de recursos, coordinando mejor las diferentes intervenciones que actualmente funcionan de manera aislada.

Según Carolina Chica, directora de economía rural y abastecimiento alimentario de la Alcaldía, el objetivo es ir más allá de una solución asistencialista, permitiendo que los hogares beneficiarios puedan realizar nuevas inversiones y aumentar sus ingresos totales.

La estrategia “Bogotá Sin Hambre 2.0” representa un enfoque integral para combatir el hambre en la capital, combinando intervenciones directas con la promoción de la autosuficiencia económica de las familias vulnerables. Esta aproximación busca no solo aliviar la inseguridad alimentaria, sino también impulsar el desarrollo económico de la población afectada, garantizando su acceso a alimentos de manera sostenible.