Nubia Córdoba, Gobernadora del Chocó, ha expresado su profunda preocupación ante el paro armado decretado por el Ejército de Liberación Nacional (ELN) en la región, que comenzó este 11 de agosto por tiempo indefinido. Sus declaraciones ponen de manifiesto la grave situación humanitaria que enfrenta el departamento.

“Con este nuevo paro estarán confinadas más de 50 mil personas y detenida toda actividad comercial, educativa y de prestación de servicios en 6 municipios”, advirtió Córdoba. La gobernadora señaló que esta medida, que afectará los ríos San Juan, Sipí y Cajón, así como la carretera Nóvita-Torrá, agudiza la crisis humanitaria en un territorio ya disputado por grupos armados ilegales.

Córdoba enfatizó la gravedad de la situación, indicando que el incumplimiento de las órdenes del grupo armado podría tener consecuencias fatales para la población civil. “La consecuencia para la gente por no atender es la vida”, afirmó, subrayando la difícil posición en la que se encuentra la comunidad local.

La gobernadora también hizo hincapié en la necesidad de considerar las particularidades del territorio en la búsqueda de soluciones. “Mientras no se tenga en cuenta la voz y las condiciones particulares del territorio, continuará esta crisis donde los derechos humanos y la precariedad es el costo que no terminamos de pagar”, declaró.

El paro armado, anunciado por el Frente de Guerra Occidental Omar Gómez del ELN, supuestamente busca proteger a la población civil de los combates con el Clan del Golfo.

Con información de Caracol Radio