El personal de seguridad del principal cementerio del Tolima, en Ibagué, notificó a las autoridades metropolitanas sobre un individuo sospechoso que estaba interviniendo en varias tumbas. Este inquietante suceso tuvo lugar recientemente y ha generado gran atención en la comunidad local.

El individuo, identificado como Omar Rodríguez, de 60 años, fue sorprendido en plena acción mientras excavaba en una tumba. Según el reporte de las autoridades, Rodríguez intentaba enterrar objetos asociados con prácticas de magia negra. La rápida intervención de la patrulla de vigilancia, alertada por el personal de seguridad del cementerio, permitió la captura en flagrancia del sospechoso.

Durante la detención, Rodríguez fue hallado en posesión de varios objetos inusuales, incluyendo restos óseos envueltos en papel con amuletos, muñecos de cera con anillos y una serpiente enrollada, entre otros artículos que se presume están relacionados con rituales de brujería. Al ser interceptado por las autoridades, el sujeto alegó no conocer a la persona enterrada en el lugar ni tener ningún vínculo con su familia, a pesar de que la lápida indicaba que se trataba de una mujer.

El comandante de la Policía Metropolitana de Ibagué, el coronel Diego Edixson Mora Muñoz, confirmó los detalles del caso: “Es importante resaltar, que al ser sorprendido por nuestros hombres, se le indagó si tenía algún parentesco con la persona que allí se encontraba descansando en paz. Según la lápida, era una mujer, pero de forma clara, el capturado manifestó no conocer ni a la familia ni a la persona que allí se encuentra enterrada”.

Las autoridades descubrieron que Rodríguez reside en el barrio María Paz de Bogotá y que había viajado a Ibagué con el propósito específico de llevar a cabo estas actividades. Los elementos incautados y Rodríguez mismo fueron puestos a disposición de la Fiscalía, que lo presentó ante un juez de control de garantías. Su captura fue legalizada y en las próximas horas se determinará su situación jurídica en una audiencia concentrada.

Este incidente ha despertado gran preocupación entre los habitantes de Ibagué, quienes se muestran consternados por las prácticas descubiertas en su cementerio principal. Las autoridades locales han reforzado las medidas de seguridad y vigilancia en el área para prevenir futuros incidentes similares.