Salvatore Mancuso es un hombre libre. En sus primeras 24 horas como ciudadano en reincorporación a la sociedad, Mancuso convocó a una rueda de prensa en un hotel del occidente de Bogotá, donde respondió a las preguntas sobre su salida de la cárcel La Picota después de más de 20 años bajo custodia en Estados Unidos y, más recientemente, en Colombia.

En su primera declaración pública, Mancuso enfatizó que ha cumplido con todas sus condenas y mantiene un compromiso con la justicia y la verdad judicial para las víctimas. “No le debo nada a la justicia”, afirmó, destacando que ha cumplido su condena por narcotráfico en Estados Unidos y la sanción de ocho años bajo el sistema de Justicia y Paz en Colombia.

“Salí de la prisión por pena cumplida. Cumplí el máximo de la condena e hice 18 años, cuando mi pena era de ocho años. No salgo porque me hayan dado algún beneficio, como el de la gestoría de paz, aunque me haya designado el presidente Gustavo Petro. El levantamiento se hace porque cumplí. No le debo nada a la justicia colombiana. No le debo nada a la justicia de ningún país del mundo. Hoy empezaré a trabajar como gestor de paz”, aseguró Mancuso.

Mancuso también expresó su intención de colaborar con la paz en Colombia. “Ya estuve hablando con Otty Patiño (Alto comisionado para la paz). En el día de hoy tendremos una reunión para poder programar y organizar todo lo que tiene que ver con la agenda de paz que debo desarrollar en el país. Quiero enviarle un mensaje a las víctimas, principalmente de reconocimiento de disculpas. No hay justificación para el inmenso dolor y sufrimiento que les causamos. Pido perdón por ello”, declaró.

En relación con su colaboración en procesos de verdad, Mancuso afirmó que entregará toda la información que posee sobre el conflicto en Colombia a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). “No quiero que mi conocimiento sea utilizado como arma política o como instrumento de venganza”, puntualizó.

Mancuso fue enfático en aclarar que no ha recibido ningún beneficio para obtener su libertad en relación con el expresidente Álvaro Uribe Vélez. “No hay ninguna conexión ni beneficio recibido de su parte para quedar libre”, dijo.

A pesar de su libertad, Mancuso aseguró que no tiene planes de dejar Colombia. Mencionó que varias universidades lo han invitado a compartir su conocimiento sobre la resolución de conflictos. Además, ha solicitado permiso al gobierno de Venezuela para recuperar restos de víctimas del paramilitarismo en territorio fronterizo, en una visita planeada con la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas.

La Corte Constitucional está evaluando un conflicto de jurisdicciones relacionado con su caso, ya que Mancuso es sujeto admitido tanto en el sistema de Justicia y Paz como en la Jurisdicción Especial para la Paz. “La libertad ya me la gané. La decisión que tome la Corte Constitucional no afecta en nada mi libertad. Lo que va a definir es quién tiene la prevalencia sobre mi participación dentro de estos dos sistemas de justicia transicional”, concluyó Mancuso.