En la mañana de este martes 9 de julio, el canciller Luis Gilberto Murillo anunció que el gobierno nacional propondrá ante el Consejo de Seguridad de la ONU ampliar el plazo para la implementación del Acuerdo de Paz, que actualmente es de 15 años. Esta decisión se toma después de reconocer que existen obstáculos estructurales que han impedido la implementación oportuna del Acuerdo.

El Acuerdo de Paz fue firmado en 2016, estableciendo un plazo de 15 años para llevar a cabo la implementación de todas las medidas y compromisos contenidos en el Acuerdo de terminación del conflicto con las desaparecidas Farc. Sin embargo, han pasado siete años y aún no hay avances significativos en el cumplimiento de todos los compromisos.

Según el canciller Murillo, “estamos proponiendo que se dé un ajuste al plan marco de implementación, que se diseñó para ser implementado en 15 años. Obviamente, con los rezagos, hay que considerar muy seriamente la posibilidad de extender el período de implementación de ese plan marco”. Murillo reconoció que “hay obstáculos estructurales que han impedido que se implemente de manera oportuna el Acuerdo”.

La solicitud será llevada por el propio presidente Gustavo Petro al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, en Nueva York, para desarrollarla y poder empezar a trabajar en su eventual materialización. Sin embargo, el mandatario también aprovechará para defender lo avanzado durante su gobierno.

La visita del presidente a la ONU fue anunciada un par de meses atrás, cuando dio a conocer sus intenciones de denunciar que el gobierno no ha cumplido con las tareas tendientes a implementar lo acordado. Lo cual ha sido documentado por medios de comunicación, firmantes de paz, comunidad internacional y diversos organismos.

En su visita al organismo internacional, el jefe de Estado planteará cinco líneas sobre las que basará la transformación de la implementación, sin dejar de reconocer que existen obstáculos estructurales que han impedido el efectivo cumplimiento de los acuerdos. Estas líneas incluyen la reforma agraria, las transformaciones del territorio y el esclarecimiento de la verdad judicial completa.

La implementación del Acuerdo de Paz ha sido un proceso lento y complicado. Desde que Gustavo Petro asumió como presidente de Colombia, los firmantes de paz vieron con ilusión la efectiva implementación de los Acuerdos. Sin embargo, otra ha sido la realidad. Desde entonces vienen denunciando el retroceso de todo lo acordado, fracasos de los proyectos productivos, retraso en la titulación de tierras, aumento de los asesinatos de desmovilizados, eliminación de dependencias esenciales para la verificación y cumplimiento de lo acordado, entre otras denuncias.

Con información de Caracol Radio y El Colombiano