La Contraloría General de la República reveló una auditoría que detectó atrasos e irregularidades en las troncales de TransMilenio de la primera línea metro de Bogotá, que están ubicadas en la Avenida 68, la Av Ciudad de Cali y la Caracas. Las obras, que inicialmente tienen un costo de $3,8 billones, presentan atrasos en todas las troncales, algunos hasta del 45%.

Además, el ente de control estableció un hallazgo fiscal por $18.179 millones debido a la no deducción de tres estampillas distritales, relacionadas con la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, para el bienestar del adulto mayor y Procultura. Esta irregularidad se detectó en la gestión fiscal de 20 contratos, 10 de obra y 10 de interventoría, por un valor total de $2,69 billones, que representan el 71% del valor total de estas Troncales.

La Contraloría también detectó 22 hallazgos administrativos en las complementarias, de las cuales 14 tienen presunta incidencia disciplinaria y 1 con connotación fiscal. Estos hallazgos se refieren a irregularidades en los pagos efectuados por Transmilenio a los contratistas del proyecto.

Frente a estos hallazgos, el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) aseguró que están revisando con la Secretaría de Hacienda los conceptos emitidos sobre el hecho generador del impuesto de estampillas. Una vez se efectúe el análisis y se unifique la línea respecto de la configuración o no del hecho generador del impuesto, ejecutarán un plan de acción de cara a atender las observaciones del ente de control.

La Contraloría General de la República ordenó un seguimiento permanente a los recursos públicos y una evaluación de la gestión fiscal de las troncales alimentadoras y obras complementarías del proyecto del Metro de Bogotá. Esta medida busca garantizar la transparencia y el buen uso de los recursos públicos en este proyecto de gran importancia para la ciudad.