El Gobierno del presidente Gustavo Petro logró un importante avance en su propuesta para ampliar el cupo de endeudamiento de Colombia en 17.607 millones de dólares, luego de que las comisiones económicas del Congreso rechazaran la iniciativa de la oposición para archivar el proyecto.

En una votación clave, los legisladores desestimaron, con 27 votos en contra y solo 4 a favor, la ponencia presentada por el senador Miguel Uribe Turbay del Centro Democrático, quien calificó la medida como “fiscalmente irresponsable” y advirtió que trasladaría los costos a los ciudadanos.

“No podemos pagar los platos rotos de la incompetencia del Gobierno. Si bien hay que cumplir con los compromisos fiscales de la nación, es importante que la manera de hacerlo sea estimulando la economía, siendo responsable, gastando menos y mejor y disminuyendo el tamaño del Estado, muy contrario a lo que este Gobierno hizo”, argumentó Uribe Turbay.

Sin embargo, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, defendió la iniciativa, asegurando que “esta ampliación es necesaria para mantener la estabilidad financiera y apoyar el crecimiento económico del país”. El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, enfatizó que con ello “van a cumplir la regla fiscal” y explicó que los nuevos desembolsos ocuparán el espacio disponible en el límite de endeudamiento autorizado, mientras que las amortizaciones realizadas liberarán espacio para nueva deuda.

De aprobarse definitivamente, el incremento elevaría el cupo total de endeudamiento a 87.607 millones de dólares, permitiendo al Gobierno acceder a mayores recursos financieros para implementar sus propuestas sociales y dotar al Estado de los recursos necesarios para cumplir con sus obligaciones, especialmente las contraídas durante la pandemia.

Si bien esta solicitud tiene características particulares debido al bajo recaudo fiscal actual, “pedir permiso para endeudarse más” es un trámite recurrente que busca “financiar los gastos del presupuesto nacional” y no representa un incumplimiento de las normas fiscales.

El proyecto de ley continuará su trámite legislativo y será debatido en las plenarias del Congreso, donde se definirá si el Gobierno Petro logra ampliar su capacidad de endeudamiento, una medida que ha generado controversia pero que, según el Ejecutivo, es crucial para impulsar su agenda económica y social y garantizar la estabilidad financiera del país a largo plazo.