En las regiones del Pacífico colombiano, donde la población afrocolombiana e indígena representa el 90% de los habitantes, ha arrancado la tercera fase del programa “Partera Vital 3.0 – Comunidad Vital”. Esta iniciativa, impulsada por el DANE, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, busca reducir el subregistro de nacimientos a través de la práctica ancestral de la partería tradicional.

“En colaboración con UNFPA realizamos este trabajo articulado para reducir el subregistro en el reporte de nacimientos y disponer de estadística oficiales, oportunas y pertinentes, para los territorios, a fin de garantizar la identidad jurídica, el goce de derechos y el acceso a servicios del Estado de estos recién nacidos”, expresó Piedad Urdinola, directora del DANE.

El proyecto se desarrollará en Chocó, Buenaventura (Valle del Cauca) y Tumaco (Nariño), regiones con altos índices de pobreza multidimensional y afectadas por el conflicto armado y las economías ilegales. En estas zonas, las cifras de mortalidad de nacidos vivos y la tasa de fecundidad en niñas de 10 a 14 años son alarmantemente superiores a la media nacional.

“En 2023, mientras la media nacional de mortalidad de nacidos vivos por cada 100 mil habitantes fue de 36,82, en Tumaco fue de 119,8; en Buenaventura de 105,3; y en Chocó de 83.4”, detalló el Gobierno nacional en un comunicado oficial.

“Partera Vital es uno de los proyectos en partería tradicional más innovadores no solo en Colombia, sino también en el mundo”, destacó Luis Mora, Representante Residente de UNFPA en Colombia. El programa articula la sabiduría ancestral con los servicios de salud, estadística y protección de las mujeres frente a violencias basadas en género y prácticas nocivas como la mutilación genital femenina y las uniones tempranas.

Las entidades vinculadas resaltan la importancia de fortalecer las capacidades y herramientas de articulación entre la partería tradicional y la institucionalidad, con el fin de reducir la morbimortalidad materno-perinatal, el subregistro de nacimientos, los tiempos de referencia y las brechas de acceso a servicios de salud, registro y protección.

“Las parteras son el centro de nuestra intervención para la protección de la vida y la comunidad. Nos unimos a sus esfuerzos por la dignificación, el reconocimiento y el respeto a esta práctica ancestral y sus saberes”, afirmó Vicente Ortega, coordinador General de Cooperación Española en Colombia.