Las cifras reveladas por fuentes gubernamentales alertan sobre un preocupante faltante en el recaudo tributario de Colombia durante los primeros cuatro meses del año. Entre enero y abril, el recaudo bruto de impuestos acumuló un déficit aproximado de $10,98 billones (US$2.850 millones) frente a la meta prevista para ese periodo.

Según los datos, en los primeros cuatro meses el recaudo tributario alcanzó los $81,53 billones (US$21.161 millones), equivalente a solo un 88% del objetivo trazado de $92,5 billones (US$24.012 millones). La situación se agravó en abril, cuando la recaudación de $18 billones (US$4.677 millones) estuvo un 27% por debajo de la meta mensual de $24,65 billones.

Analistas atribuyen este bajo recaudo al impacto de la desaceleración económica que atraviesa el país. En 2022 la economía colombiana creció apenas un 0,6%, mientras que en el primer trimestre de 2023 avanzó un modesto 0,7%.

Las cifras tributarias ponen en riesgo el cumplimiento de la meta de déficit fiscal para este año, establecida en un 5,3% del Producto Interno Bruto (PIB). Expertos han advertido sobre la presión que ejerce esta situación en las finanzas públicas.

En marzo, el Comité Autónomo de la Regla Fiscal (Carf) anticipó que Colombia incumpliría la regla fiscal en 2024 según el plan financiero del Gobierno. Ante esto, el presidente Gustavo Petro ha sugerido flexibilizar la regla e incrementar la inversión pública para impulsar el crecimiento económico.

No obstante, la calificadora Fitch advirtió que esta medida implicaría un desafío para la consolidación fiscal del país. En respuesta, el Ministerio de Hacienda tramita ante el Congreso una ampliación del cupo de endeudamiento hasta por US$17.607 millones para cumplir con el servicio de deuda y financiar el plan de desarrollo gubernamental.

Con información de La República