La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) logró detener el giro de $322.000 millones que el exdirector Olmedo López había ordenado antes de abandonar el cargo. El actual director Carlos Carrillo explicó que estos recursos, inicialmente destinados a Corantioquia, Corpourabá y el municipio de Girón, carecían de justificación técnica y los montos eran “desproporcionados”.

Los $322.000 millones estaban distribuidos de la siguiente manera: $180.000 millones para Girón, $97.000 millones para Corantioquia y $43.000 millones para Corpourabá. Carrillo aseguró que Girón, al no ser un municipio pobre, no ameritaba recibir una asignación tan cuantiosa.

Tras semanas de negociaciones, la UNGRD logró que las corporaciones y el municipio renunciaran voluntariamente a los recursos. “Hemos llegado a un acuerdo para revocar esos actos administrativos”, afirmó Carrillo, precisando que los $322.000 millones serán reasignados de forma equitativa a zonas con mayores necesidades.

Adicionalmente, la UNGRD busca el desistimiento del Fondo de Inversión Colectiva por $15.000 millones asignados a Sabana de Torres. También revisa el origen técnico y monto de $238.000 millones destinados a Uribia para acueducto y carrotanques.