EE.UU. revisa cerca de 50 solicitudes de empresas petroleras que buscan licencia para hacer negocios en Venezuela
Por: Maria José Salcedo
24 mayo, 2024
Estados Unidos ha recibido cerca de 50 solicitudes de licencias individuales de empresas que buscan realizar negocios en Venezuela, según informó Francisco Palmieri, jefe de la Misión de Washington en dicho país. Este aumento de solicitudes se produce tras la expiración de la autorización general otorgada el año pasado al sector energético venezolano.
En abril, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos anunció que no renovaría la licencia general debido al incumplimiento de las condiciones para una elección presidencial competitiva en Venezuela. Sin embargo, se comprometió a emitir licencias individuales para empresas del sector petrolero. Palmieri mencionó en una entrevista con el medio venezolano Efecto Cocuyo que el número de solicitudes recibidas oscila entre 20 y 50.
Entre las empresas que ya han recibido estas licencias se encuentra el productor de petróleo francés Maurel & Prom, que a principios de mes informó que obtuvo el permiso para expandir sus negocios con la petrolera estatal PDVSA. La española Repsol también recibió la aprobación para continuar y ampliar sus operaciones de petróleo y gas en Venezuela. Sin embargo, muchas otras empresas aún están a la espera de las aprobaciones correspondientes.
Según una orientación del Departamento de Estado al Tesoro, Estados Unidos pretende priorizar la emisión de licencias a empresas con producción y activos petroleros existentes sobre aquellas que buscan ingresar por primera vez al país. Palmieri destacó la importancia del sector petrolero para la reactivación de la economía venezolana, pero subrayó que lo más crucial es la elección presidencial del 28 de julio.
El proceso no ha estado exento de complicaciones. La petrolera británica BP informó que las negociaciones para el proyecto de gas costa afuera Cocuina-Manakin, compartido con Trinidad y Tobago, se han puesto en pausa tras la expiración de la licencia que autorizaba dichas conversaciones. BP detuvo todas las discusiones sobre el desarrollo del proyecto Manakin-Cocuina después del vencimiento de la licencia general número 44 de la OFAC en abril de 2024.
Palmieri también indicó que los canales diplomáticos con el régimen de Nicolás Maduro permanecen abiertos, con conversaciones sobre migración y economía en curso. Respecto a las elecciones, Estados Unidos espera una participación masiva y que finalmente se permita a los grupos internacionales supervisar el proceso. Un funcionario estadounidense de alto rango mencionó que Washington ve como una “cuestión muy abierta” la posibilidad de que Nicolás Maduro gane la reelección si se realiza una votación libre en julio.
El gobierno del presidente Joe Biden está colaborando con las partes interesadas venezolanas, así como con socios regionales y europeos, en un intento por mantener el proceso electoral en marcha, aunque prevé dificultades adicionales a medida que se acerca la votación del 28 de julio. Maduro, cuya reelección de 2018 fue rechazada por los gobiernos occidentales por considerarla una farsa, enfrenta una fuerte crisis económica en Venezuela.
Estados Unidos volvió a imponer sanciones petroleras a Venezuela, acusando a Maduro de no cumplir plenamente los acuerdos alcanzados con la oposición para garantizar elecciones libres y justas. A pesar de esto, Washington reconoce que Maduro ha cumplido algunos de sus compromisos, como fijar una fecha para las elecciones y permitir que se presente un candidato de la oposición.