En una jornada marcada por múltiples atentados terroristas, el Gobierno Nacional ha enfrentado una grave crisis de seguridad en los departamentos de Cauca y Valle del Cauca, dejando víctimas fatales, heridos y afectaciones al orden público.

Desde diferentes sectores políticos, se han alzado voces condenando estos actos de violencia y cuestionando la estrategia del Gobierno frente a los grupos armados ilegales.

El senador Ariel Ávila, de la Alianza Verde, recomendó al Gobierno levantar de inmediato la mesa de diálogo con las disidencias de las FARC, advirtiendo sobre el deterioro de la seguridad en el Cauca y la posibilidad de que el terrorismo se convierta en la práctica de estos grupos en otras regiones como Tolima y Huila.

Por su parte, León Valencia, director de la Fundación Paz y Reconciliación, criticó la estrategia del presidente Petro de otorgar “gabelas” a las disidencias, lo que según él ha permitido su fortalecimiento y expansión. Valencia enfatizó la necesidad de una acción militar más contundente para contenerlos.

El exfiscal general Alfonso Gómez Méndez expresó su preocupación por la falta de control territorial del Estado en algunas regiones, lo que ha permitido el surgimiento y accionar de estos grupos armados ilegales. Gómez cuestionó la efectividad de la política de “Paz Total” del Gobierno y llamó a replantear el rol de la fuerza pública en la conservación de la soberanía nacional.

Mientras tanto, la congresista Paloma Valencia responsabilizó directamente al Gobierno por la situación de violencia, argumentando que su manejo de los cultivos ilícitos y del control territorial ha derivado en estas afectaciones a la población.

Con información de Caracol Radio